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Periodista

Click, luego existo

La exposición de fotografías de teatro de Fernando Rodríguez en La Felguera

La pista la encontré en un recomendable libro de Joan Fontcuberta ("La cámara de Pandora") en el que el fotógrafo catalán analiza la situación de la fotografía y los efectos del impacto tecnológico que, en muchos casos, ha despojado los trabajos fotográficos de autenticidad para meternos en una maraña de imágenes que hay que desbrozar a diario

En este libro, Fontcuberta dice "fotografío, luego existo" y aclara: "yo le debo la vida (a la fotografía) no porque me la salvara, sino porque me la dio". Y es en estas palabras en las que encuentro ciertas similitudes con Fernando Rodríguez que ha sabido convertir su afición en su profesión, de hecho su trabajo como redactor gráfico del diario LA NUEVA ESPAÑA es una prueba fehaciente de su capacidad para ilustrar los artículos, aunque es en su obra más personal donde realmente encontramos al fotógrafo que lleva moldeando más de la mitad de su vida.

Antes de comenzar a trabajar como fotógrafo de prensa Fernando Rodríguez ya había comenzado a tejer su traje fotográfico con una interesante actividad. Fue, en la década de los ochenta, uno de los promotores de la Asociación Juvenil de Fotografía "Contraluz". Es en aquel tiempo de juventud, rodeado de cubetas y líquidos en el cuarto oscuro, en el que Fernando va buscando y cimentando un discurso fotográfico serio e inteligente, de observación tranquila, pausado, retratando sin prisa. Hay trabajos, de factura documental, que tal vez convendría recuperar, y que fueron vistos en sus primeras exposiciones individuales y colectivas con los integrantes de "Contraluz". De su trabajo como fotoperiodista encontramos rastros en las exposiciones que bajo el título de "Miraes" viene haciendo la Asociación de Fotoperiodistas Asturianos de la que, obviamente, es miembro. Son trabajos marcados por la noticia, por momentos en los que -sin descuidar su capacidad técnica para manejar la cámara- hay que enfocar y disparar lo más rápido posible y antes de que los protagonistas se disuelvan.

Algunos de los trabajos de Fernando Rodríguez han recibido premios los accésit en la III y IV edición del premio Fotografía APFA-Parque Científico y Tecnológico de Gijón. A estos premios hay que añadir los conseguidos en el 2015: el premio a la mejor fotografía teatral "Escenamateur" en Madrid, la mención a la mejor fotografía de teatro en el IX festival de Teatro Amateur Ciudad de Oviedo, y el premio "Escenamateur" en el III Certamen de fotografía teatral FATEX 2015 que organiza la Federación de Asociaciones de Teatro de Extremadura.

Ahora tenemos la oportunidad de acercarnos a una potente colección que agrupa un buen número de fotos realizadas en distintas representaciones teatrales incluida "Troyanas" que ha sido premiada con el galardón nacional "Escenamateur 2015". De toda la serie ésta es la única fotografía que no se ha tomado en la representación en directo, fue hecha en uno de los ensayos. Para esta exposición, en el Centro de Creación Artística Carlos Alvarez Nóvoa de Langreo, Fernando Rodríguez ha seleccionado las fotos con buen criterio y consigue llevarnos a la esencia del teatro. Con los resultados a la vista puede parecernos fácil hacer fotos en el teatro. No se engañen, es todo menos fácil. Si bien es cierto que el fotógrafo no tiene que preocuparse por la iluminación, hay algunas cosas que complican las tomas. La primera que ese "click" del título no siempre gusta a los actores y al público: algunas veces despista a unos y a otros. Otro inconveniente es que el fotógrafo tiene que buscar el sitio apropiado en el patio de butacas o en el pasillo. Son complicaciones que Fernando resuelve con maestría. ¿Cómo?, tratando de pasar desapercibido y preparando el trabajo: conocer el argumento, cómo va la iluminación y el sonido.

No sestamos observando fotografías realizadas en un estudio, aquí no se para la obra y los actores no están posando. La escena que vemos, que ahora nos atrapa en la calidez de la sala de exposiciones, es cosa de dos: del que actúa y del que con su "click" captura la acción. Ninguno falla.

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