Por desgracia, la deriva del PSOE en Mieres parece un punto de no retorno. En vez de liderar la oposición con propuestas serias y rigurosas, prefiere dedicar sus esfuerzos a poner palos en las ruedas y apuntarse a cualquier viaje con tal de criticar la labor del Gobierno de Mieres. Es la línea oficial que les marca el presidente de la Comisión Gestora que dirige el PSOE local desde hace un año, Jesús Gutiérrez, con sus apariciones estelares y trimestrales.
Ahora los concejales del PSOE quieren sacar pecho con la Escuela de 0 a 3 años. Cuando ganamos las elecciones en mayo de 2011 nos encontramos con una Escuela en la que había espacio para una cocina pero ni un solo euro para poder equiparla y que pudiera funcionar en septiembre. No era una excepción sino la tónica general del Ayuntamiento: no hubo traspaso de poderes sino traspaso de marrones de dimensiones bíblicas: deuda millonaria, miles de facturas en el cajón sin pagar y 'sorpresas' como una cocina sin equipar cuando tenía que ponerse en funcionamiento en apenas unas semanas. Así era el 'modus operandi' del Gobierno del PSOE. Ahora salen a la opinión pública para sentar cátedra sin ningún complejo y hablan de incapacidad sin sonrojarse. Éste es el nivel. En su artículo, recurren a la confusión para intentar arrimar el ascua a su sardina pero lo único que consiguen es mostrar su insolvencia y exhibir su falta de credibilidad. Nadie ha puesto en duda que las trabajadoras de la Escuela fueran personal municipal, de hecho fue Luis María García quien firmó su contrato de trabajo. Por cierto, fue ese mismo alcalde quien los contrató bajo la modalidad de 'fin de obra' y vinculando su contrato a la subvención de la Consejería de Educación. Modalidad que fue la que las sentencias obligaron a modificar porque el juzgado consideró que eso no era legal al ser relaciones de trabajo de carácter "indefinidas". Es decir, de los polvos del PSOE, estos lodos.
Ahora los concejales socialistas enarbolan la bandera de la Escuela de 0 a 3 años, pero no mueven la mano para descolgar el teléfono del Consejero de Educación y pedir que aumente la financiación y así poder subir el sueldo de estas trabajadoras. Como tampoco han movido ni un solo dedo cada vez que la Consejería quería recortar la plantilla de la Escuela en los últimos años o para lograr que estas escuelas estén donde siempre tuvieron que estar: en el sistema educativo asturiano, como el resto de colegios e institutos. Sin embargo, el PSOE de Mieres no duda en apuntarse a un bombardeo con tal de criticar al Gobierno local. Sus prioridades están claras: tan sólo buscan generar ruido y confusión. Una lástima.
El PSOE debería ser valiente y coherente. ¿Por qué el Gobierno de Javier Fernández no coge el toro por los cuernos y aumenta la financiación de las escuelas de 0-3 años para que todos sus trabajadores y trabajadoras en Asturias puedan tener sueldos más dignos? Sin embargo, los socialistas prefieren aquello de 'yo decido y tú pagas'. La educación infantil es competencia del Principado de Asturias pero son los Ayuntamientos los que tenemos que sacarle las castañas del fuego asumiendo la gestión de estas escuelas. No sólo la gestión, sino buena parte del gasto: Mieres, en los tres últimos años, ha tenido que aportar más de 300.000 euros de los recursos municipales para cuadrar las cuentas de un servicio autonómico.
El PSOE podría dar menos lecciones y trabajar un poco más en beneficio de Mieres. Su gran aportación ha sido convertir a este municipio en involuntario coleccionista de promesas incumplidas. Hace diez años aprobaron inversiones por valor de más de ocho millones de euros que siguen sin hacerse realidad. En 2007 aprobaron más de dos millones y medio para el Centro de Salud de Turón, ese mismo año también aprobaron 2,7 millones para el Parque Tecnológico de Figaredo; y en 2008 anunciaron la remodelación del Centro de Salud Mieres Norte. Seguimos esperando. Como también seguimos esperando por compromisos en relación a los accesos al Hospital Álvarez-Buylla, la actuación en varios colegios públicos del municipio (como Santullano, Ujo o Teodoro Cuesta), los desarrollos urbanos que SOGEPSA tiene paralizados en Mieres desde hace años, los accesos al monte Polio, las actuaciones para mejorar las carreteras autonómicas que hay en el concejo o las propuestas de uso para el antiguo Hospital de Bustiello (declarado BIC) y cerrado desde hace más de 15 años tras la rehabilitación que hizo Fucomi. En todos los casos? seguimos esperando. Son sólo algunos ejemplos porque la lista es de promesas incumplidas y actuaciones pendientes es más larga que la de los Reyes godos.
El Principado no cumple lo que promete pero tampoco da la cara. Tres ejemplos: hace un año, el Alcalde puso sobre la mesa un plan de empleo regional y específico para los mayores de 45 años. Ya en la anterior legislatura propusimos a Javier Fernández que utilizase los dos millones de euros que nos deben por la rehabilitación del Pozo San José para financiar las actuaciones de recuperación del patrimonio minero en el concejo. Y hace unos meses pusimos sobre la mesa la creación de un Consorcio público para liderar hacer realidad la mayor oferta de patrimonio industrial de Europa. En todos los casos? seguimos esperando respuesta.
Con estas credenciales, los concejales del PSOE en Mieres deberían dar menos lecciones y trabajar más para cumplir sus promesas. Por desgracia, prefieren hacer el papelón y buscar cobijo bajo la hipocresía. Deberían reflexionar, ponerse las pilas y trabajar no al dictado del partido sino en defensa de los intereses de los vecinos y vecinas que los votaron.
