Dos días hicieron falta para sacar a cuarenta y seis vacas de los pastos de altura cercanos a La Farrapona y Saliencia, en el Parque Natural de Somiedo, después de que se quedasen atrapadas debido al temporal de nieve y frío que pasó por Asturias el pasado fin de semana. E hizo falta hasta la intervención de una empresa gijonesa experta en el desarrollo de excavaciones y movimientos de suelo para poder llegar hasta los animales, propiedad de un ganadero del concejo de Santo Adriano.
El temporal pilló a las reses en medio del monte, por encima de los mil metros de altura sobre el mar, y no hubo tiempo para bajarlas debido a la gran cantidad de nieve caída. El propietario de los animales pidió ayuda al Ayuntamiento de Somiedo, donde le detallaron que enviarían un helicóptero para echarles comida desde el aire. Pero esta solución no satisfizo al ganadero, quien tenía extrema urgencia en sacar a los animales pues corrían peligro de muerte por las bajas temperaturas. Así es que decidió actuar. Y contactó con la empresa gijonesa para poder acceder hasta los pastos donde estaban las vacas. Para ello, contó con la ayuda del municipio leonés de San Emiliano, que mandó una pala con cuña para abrir paso por la vertiente sur. También los técnicos de la empresa gijonesa accedieron por la zona leonesa y lo hicieron circulando en condiciones extremas por una pista desde Torrestío a los lagos de Saliencia pasando por La Farrapona entre la nieve.
Ayuda de montañeros
Tanta nieve se acumuló en el Parque Natural de Somiedo el pasado fin de semana que los operarios pasaron por zonas con taludes de alrededor de cuatro metros de altura. Y todo, bajo la amenaza de riesgo de aludes, lo que complicó aún más el rescate debido a la peligrosidad que entrañaba cualquier movimiento con la maquinaria por las adversas condiciones climatológicas. Durante las labores de rescate de los más de cuarenta animales, los técnicos de la empresa contaron también con la ayuda de montañeros, que se ofrecieron a echar una mano en lo necesario.
Después de dos días de vertiginoso rescate, los animales fueron evacuados de la zona. Primero a pie, siguiendo el camino marcado por las máquinas que trabajaron hasta llegar a donde se encontraban y, después, ya como siempre, en el camión y directas a la cuadra, donde pasarán los próximos meses estabuladas hasta que el buen tiempo vuelva a reinar en Asturias.
