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Menos amigos y más estrés, los efectos de utilizar el móvil de forma compulsiva

Un estudio demuestra que el uso adictivo del teléfono inteligente pone en peligro las relaciones sociales, pese a ser diseñado para fomentarlas

Menos amigos y más estrés, los efectos de utilizar el móvil de forma compulsiva

"Usar el teléfono móvil de un modo compulsivo hará que tengas menos amigos y más estrés". Este es el titular que utilizan cuatro investigadores de la Universidad de Oviedo y de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de la Politécnica de Madrid para resumir las conclusiones de un estudio publicado en la revista "Social Science Computer Review". Sus autores, entre ellos los psicólogos asturianos Juan Herrero y Andrea Torres, advierten de que pese a que los smartphones se diseñaron "para facilitar el contacto entre personas", su uso adictivo pone en peligro esas relaciones. Y lo que es más: genera estrés y conflicto familiar.

Para llegar a estos resultados, los investigadores realizaron un seguimiento durante un año a 416 usuarios de teléfonos inteligentes. Su objetivo era analizar la relación entre su uso compulsivo, el apoyo social a lo largo del tiempo y sus niveles de angustia psicológica. "A más adicción al móvil, menos apoyo social. Además, las trayectorias de apoyo social a lo largo del tiempo entre individuos están influenciadas negativamente por los niveles anteriores de adicción al smartphone", asegura Antonio Hidalgo, de la Universidad Politécnica de Madrid. Junto a él firman la investigación, Alberto Ureña, y los expertos de la Facultad de Psicología de la institución académica asturiana, Juan Herrero y Andrea Torres.

Este estudio comparte con otros vinculados a internet y a los smartphone la idea de que las tecnologías de la comunicación pueden conducir al aislamiento social, lo que tiene consecuencias negativas para el bienestar de los usuarios. "La versatilidad de los teléfonos inteligentes para la comunicación tiene el potencial de promover un uso cada vez más extenso en nuestra vida diaria y los investigadores estamos comenzando a advertir sobre sus posibles consecuencias negativas asociadas", explican los investigadores.

Aunque ya la Organización Muncial de la Salud alerta sobre esta creciente problemática, la mayoría de investigaciones realizados hasta la fecha únicamente tienen en cuenta universitarios, "que representan solo una pequeña parte de la población"; y "esto hacía difícil que sus resultados puedan extrapolarse". El estudio de la Universidad de Oviedo, por contra, emplea "una muestra representativa de la población española y hace un seguimiento más duradero en el tiempo a los usuarios, algo fundamental para seguir avanzando".

Los detalles

Psicólogos e ingenieros. En el estudio participan expertos de la Universidad de Oviedo y de la Politécnica madrileña.

Más de 400 usuarios. Los científicos siguieron durante un año a un total de 416 usuarios de distintas franjas de edad.

Consecuencias. A más adicción al móvil, menos apoyo social. Y a la vez, más estrés y más conflictos familiares y con amigos.

Menos vida personal. Los móviles, por su versatilidad, tienen el potencial de favorecer un uso cada vez más extenso.

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