Los niños con pantallas en su habitación -ya sea un móvil, una tablet o un ordenador- dedican menos tiempo al estudio. La afirmación parece lógica, pero investigadores de la Universidad de Cádiz, la Autónoma de Madrid y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) lo han confirmado tras estudiar a casi 1.600 jóvenes de entre 9 y 18 años de toda España. Los científicos midieron durante una semana la actividad física de los adolescentes a través de un acelerómetro. El trabajo concluye que las chicas son más sedentarias que los chicos al dedicar más tiempo a actividades educativas como leer o estudiar. Otra conclusión es que ellos tienen más ordenadores, consolas y televisores dentro de sus dormitorios aunque ellas pasan más tiempo navegando por internet o chateando con amigas.
"De las más de siete horas de tiempo libre que tiene un adolescente cada día de media, dedica tres frente a una pantalla y algo más de dos a los estudios. Esto hace que este sedentarismo influya en el riesgo de padecer enfermedades cardiometabólicas a edades tempranas", explican los autores de la investigación. Los científicos analizaron los hábitos juveniles y concluyeron, por ejemplo, que disponer de jardín en casa frena la adicción de los jóvenes a las nuevas tecnologías. Por contra, tener pantallas digitales en la habitación provoca que ambos géneros dediquen menos tiempo a las tareas escolares, pues se distraen con mayor facilidad. Precisamente los expertos asturianos aconsejan a los padres que el uso del móvil y del ordenador por parte de sus hijos se haga siempre en espacios comunes para controlarlos.