La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Pulso de poder en el Monsacro

El monasterio de San Vicente y la Catedral de Oviedo se disputaron en la Edad Media el control de la montaña, foco espiritual y económico

Panorámica desde la ermita de Santiago, en el Monsacro, con la capilla de la Magdalena a la derecha, y al fondo, Soto de Ribera y Oviedo. | Miki López | LUISMA MURIAS

El Monsacro, la montaña santa de Asturias, fue durante siglos “el espacio de disputa de los dos grandes señores feudales del centro de Asturias, el monasterio de San Vicente y la Catedral de Oviedo”. El arqueólogo Alejandro García Álvarez-Busto, miembro del grupo de investigación de la Universidad de Oviedo “Arqueos”, explicó ayer, durante la segunda conferencia de las Jornadas de Investigación y Difusión sobre el Monsacro organizadas por el Real Instituto de Estudios Asturianos (Ridea), cómo las relaciones de poder entre ambos poderes configuraron ese territorio, codiciado por la riqueza de sus pastos.

Esa visión, que se proyecta más allá de la mística y la leyenda que encierra la montaña, se fundamenta en hechos documentados. Alejandro García cita a Rodericus Sebastianiz, un monje del monasterio de San Vicente al que el 1 de julio de 1158 el rey Fernando II de León y su hermana la reina Urraca entregan los terrenos y el coto del Monsacro. “Algunos investigadores piensan que ese es el origen de las capillas”, apostilla el arqueólogo.

El grupo “Arqueos”, con el catedrático José Avelino Gutiérrez González al frente y colaboradores notables como el grupo “Vestigia”, liderado por Natividad Torres, suponen que la primera en construirse fue la capilla de la Magdalena, la menos elevada y la más visible desde el valle, hacia el siglo XIII. “Creemos que el monasterio de San Vicente mandó edificarla y que era una manera de afianzar su poder en esa zona. Se creó una pequeña granja monástica con su capilla –queda por resolver si era una decanía o un priorato– que tendría algunos campesinos a su servicio”, explica Alejandro García.

La Catedral de Oviedo, con su obispo y su Cabildo, constituía en la Edad Media el otro gran foco de poder en los territorios asturianos. Bajo su señorío estaban los territorios que rodeaban el dominio de los monjes de San Vicente en el Monsacro. En un determinado momento, explica Alejandro García, la Catedral quiso mantener a los monjes bajo control en el Monsacro y sacar rédito de su posición, cobrando al monasterio de San Vicente por transitar por sus tierras.

Alejandro García, durante su conferencia de ayer en el Ridea. |

Los monjes se dedicaban a la cría de ganado vacuno, ovino y caprino, del que obtenían leche que transformaban en queso. Los nutritivos pastos del Monsacro eran su mayor riqueza, porque el queso constituía una parte importante de la dieta monástica y además se utilizaba, como el vino y el propio ganado, como moneda de pago.

“A partir de los siglos XIV y XV San Vicente entró en cierto declive, hace aforamientos, y el obispo y los canónigos aprovechan para hacerse con el control del Monsacro. A finales del siglo XIV la Catedral controla ya el Monsacro”, afirma Alejandro García. Es en esa época en la que se supone que la Catedral, para hacer más evidente esa supremacía, erige la capilla de Santiago, más elevada, de planta octogonal y rematada en el siglo XV con una bóveda nervada, de carácter memorial y más ligada a la tradición y el culto a las reliquias, con el pozo de Santo Toribio y la Cueva del Ermitaño, donde se dice que se escondió el Arca Santa.

Del inicio y el final de este pulso de poder entre los dos grandes señores, terrenales y espirituales, de la Edad Media en Asturias ha quedado constancia incluso documental, pero lo que los historiadores echan en falta es información sobre los capítulos intermedios. Para reconstruirlos necesitan “investigar en los archivos y excavar”, y en ello estaban cuando estalló la pandemia.

Alejandro García asegura que ya hay mucho trabajo hecho. “Hicimos un barrido con georradar, con resultados muy prometedores, que mostró un conjunto muy importante de estructuras soterradas y ahora vamos a plantear excavar en unas zonas determinadas y hacer dataciones absolutas de los morteros de las capillas”, indicó, para ello confían en el apoyo institucional: el Ayuntamiento de Morcín, la Consejería de Cultura y la Universidad de Oviedo.

Compartir el artículo

stats