Luanco, S. F.

Pasadas las ocho y media de la mañana de ayer varios vecinos de Luanco contemplaron una escena desconcertante: tres jóvenes -al cierre de esta edición, todavía sin identificar- rompían las cadenas que separan la avenida del Gayo de las instalaciones portuarias luanquinas al lanzar el Ford Fiesta matrícula BU-5787-M al agua. Los testigos vieron cómo caía el turismo al mar y cómo desaparecían inmediatamente después los responsables.

La Policía Local de Gozón recibió un aviso de una de las personas que contemplaban la escena. Los agentes locales se personaron en el lugar, y, después, alertaron a los Bomberos, Salvamento Marítimo y Guardia Civil. En un principio, los agentes de seguridad temían que hubiera alguna persona en el interior del vehículo hundido. Finalmente, esto se descartó gracias a la intervención de los buzos y de las cinco dotaciones de Bomberos de Asturias que se personaron en la explanada del Gayo.

Los Bomberos fueron los que se encargaron de hacer emerger el coche, sumergido a unos 6 metros de profundidad. Se ayudaron de uno de sus vehículos con autoescalera. Las malas condiciones que presentaba el mar dificultaron en principio la tarea de los buzos. La Guardia Civil de la Comandancia de Gijón se encargó de realizar las diligencias del caso.

El Ford Fiesta que sembró la alarma entre los vecinos de Luanco -durante más de dos horas un helicóptero sobrevoló la villa buscando el coche- resultó ser un vehículo robado. Tenía su domicilio en la ciudad de Gijón y, según testigos del hecho, había sido puenteado(forzado el sistema de bloqueo del encendido del automóvil). Los agentes de seguridad buscan ahora a los responsables del hundimiento del coche.

Las maniobras del rescate del puerto del Gayo provocaron gran expectación entre los vecinos de Luanco que se fueron acercando durante toda la mañana al lugar de los hechos.