La sierra de Carondio ubicada entre los concejos de Villayón y Allande, conserva innumerables vestigios de las culturas primitivas
El itinerario por este paisaje protegido da comienzo en el Alto de Bustantigo (1.028 m) al que hemos accedido por la carretera ALL-5 procedentes del alto de La Marta (ALL-4), ambas procedentes del Km 38, 5 de la carretera AS-14. Una vez en el mismo y desde su aparcamiento donde se levanta una de las torres y el panel del sendero P. R. AS-254 que llega hasta la aldea de San Emiliano, nos vamos por la amplia pista que en su discurrir va paralelo al antiguo camino real vaqueiro denominado "La Carreiriega de los Gallegos".
Profundizamos con sentido occidental topándonos con varios cruceros que van en dirección hacia la diferentes torres que salpican el territorio. Seguimos el rastro de la amplia pista que sube ligeramente, hasta toparnos con el desvío que nos conduce a la central eléctrica del parque. Después seguimos con nuestra aproximación al Carondio con una sostenida ascensión salpicada de indicadores y paneles sobre la ubicación de los yacimientos y necrópolis por allí distribuidas, considerándose como una actuación meritoria, incluida en el proyecto del parque. Tales indicadores no existen en otros parques eólicos de la región como el caso de Bodenaya en Salas.
En nuestro avance nos aproximamos a la divisoria con el vecino municipio de Villayón, dejando a nuestra derecha el montículo de la Peña del Conde y más adelante el pico Agudo (1.143 m) que se levanta en el interior de la finca privada de Zaporrel. Si apenas desnivel y a la altura de la peña Os Tourus, aparece el pinar de la vega del Zapatello donde se descubre una laguna.
Aquí variamos el rumbo al sur y pronto aparece la traza del legendario camino que soslayamos para seguir el rumbo de la pista que se adentra en un pinar a cuya salida nos acercamos a la laguna de la Veiga Avades (1.116 m) -5 Km en 1 hora y 30 min de marcha-, que nos ofrece una buena panorámica sobre el pico Carondio, que cubre el horizonte próximo. También en sus cercanías se conserva hincado en la traza del camino real, un mojón de origen medieval que señaliza los cruceros de las rutas tradicionales. Por uno de ellos arranca el camino directo a la cima en cuya base contemplamos otro de los yacimientos más importantes, A Llastra d'Afiladoira, con sus huellas dolménicas muy sobresalientes y que no pasan desapercibidos para el senderista.
Eludimos ese camino y proseguimos con la pista adelante con nueva remontada que discurre por la cara sur del Carondio hasta llegar al siguiente collado, situado bajo los auspicios del pico Suarribas. La pista y las torres prosiguen más allá hasta el pico Vigueiras, pero en este collado acometemos la ascensión siguiendo la traza de un sendero muy marcado que traspasa otro yacimiento señalizado y más adelante, la "La Carreiriega de los Gallegos" el camino real que cambia de vertiente bajando hasta la collada de Enterríos, en la cabecera del valle del río Carbonel en Villayón. Por ahí nos plantamos en la base de la Peña Molles donde damos un giro a la derecha para remontar por la vertiente norte la cima del Carondio (1.222 m) y techo de la sierra 6,9 km en 2 h y 15 min de marcha.
En su cimera se levanta un vértice geodésico y un buzón montañero instalado por el G. M. Peña Furá de Navia en el año 1987. Por la vertiente norte la vertical ladera profundiza al concejo de Villayón por el valle del río Carbonel, asomando en lo más hondo del mismo las aldeas de Barandón y Castanedo. En días despejados incluso se pueden contemplar la costa de Navia y mirando al Sur aparecen imágenes de la Bobia de los Oscos cosida materialmente por torres de aerogeneradores eléctricos.
Desde el Carondio retornamos al lugar de inicio descolgándonos por la vertiente opuesta para enlazar de nuevo con el itinerario de retorno.
