El Palacio de los Deportes de Oviedo acogió el pasado sábado el Campeonato de España de lucha olímpica para las categorías escolar y junior.
En este mismo escenario nació hace ya más de tres décadas el Club Lucha Oviedo, formado por un grupo de pioneros entusiastas capitaneados por el maestro Julio Muñiz, por entonces un veinteañero con amplia experiencia en la docencia deportiva y con un currículo deportivo marcado por éxitos en los deportes de contacto. Así que ésta era la cita perfecta para que un grupo de luchadores del club de todos los tiempos le rindieran un pequeño homenaje sorpresa al maestro y amigo que les había transmitido los valores del deporte de la lucha.
Bajo la batuta de Martín Álvarez, hoy árbitro nacional y federativo regional, Julio sintió el cariño de los suyos. No se quisieron perder el momento su mujer, Amaya, y su hija, Marina. También estaba Santiago González, el luchador con más medallas y participaciones nacionales e internacionales, o el árbitro mundial Carlos González. A su lado también se situaron los jóvenes valores de la entidad, como Alain Sánchez, que se proclamó esa misma tarde campeón de España junior, pocos días después de adjudicarse el nacional cadete, o Laureano González, bronce en ese último Campeonato de España cadete. Aunque los entrenamientos del Palacio de los Deportes actualmente los encabeza el también alumno Andrés González, Muñiz sigue compartiendo jornadas con los luchadores en el Gimnasio Arenas. En el recuerdo siempre estará el Subcampeonato de España por clubes del Lucha Oviedo, una entidad que ha destacado en la lucha libre olímpica, la grecorromana, la lucha sambo, o el grappling. Para el recuerdo de Julio Muñiz ahora, una muestra de reconocimiento y cariño en casa.
