Paula González es una de las esperanzas de futuro del Avilés Atletismo y se ha ganado es "título" a golpe de carreras de vallas, una modalidad poco habitual para sus catorce años, pero que a ella le apasiona. "Cuando era alevín, no nos dejaban saltar vallas y yo miraba a 'los mayores' con envidia mientras entrenaban. Siempre me llamó la atención y en cuanto pude probé", recuerda la atleta. Esa envidia sana la ha llevado a ser hoy un referente regional en esta prueba en su categoría, la cadete, pero lo que más sorprende a los que trabajan con ella es su progresión: "Está avanzando a un ritmo exponencial y eso que por el momento no entrena en tecnificación como muchas de sus rivales. Es un gustazo entrenar con ella, porque es muy trabajadora", señala el presidente del Avilés Atletismo, David Sotura.
González ha participado en tres campeonatos de España individuales. El primero, en infantiles, "no salió muy bien"; en el segundo, ya en cadete, llegó a las semifinales y en este último se ha colado en la final para conseguir el quinto puesto. "Ojalá siga yendo mejor", bromea la joven pensando en las medallas. Atrás quedan los nervios del primer campeonato, que fue superando en los otros dos individuales y los dos Nacionales por autonomías que disputó. "Creo que ahora estoy más tranquila, porque fui conociendo gente. Ahora ya conozco el ambiente y me puedo centrar en las pruebas", explica.
En el último Campeonato de España cadete, en pista cubierta, la atleta disputó los 60 metros vallas. "Me salió un campeonato redondo", sentencia. Y es que la avilesina fue mejorando su marca personal en cada ronda de la competición: en la clasificatoria, la semifinal y la final. "A nivel regional soy primera del ranking y eso que hay competencia, pero supongo que encontrarme con rivales más fuertes en el Nacional, estar en ese ambiente, me ha ayudado a conseguir mejorar tanto", comenta. Así, firmó una marca de 9 segundos 13 centésimas.
Paula González tardó en dar con el atletismo, pero afirma que no cambia por nada este deporte. Antes de comenzar a entrenar en las pistas, tuvo que colgar el "tutú" y el judogui. "Empece a correr porque yo hacía ballet y la verdad es que no estaba muy convencida de que fuera lo mío. También probé con el judo, pero, por una compañera de clase y dos amigas más, me interesé por el atletismo y resultó que era lo que me llenaba", explica la atleta. Fue en 3.º de Primaria, cuando tenía 8 años.
Desde fuera, las vallas se ven como una prueba complicada, y desde dentro no es diferente: "Es una prueba muy explosiva, pero que a la vez necesita mucha técnica. Hay que entrenar fuerza para la velocidad y técnica para las vallas, es una prueba muy completa". En mujeres, las vallas se colocan a dos alturas: antes de juveniles a 76 centímetros, en juveniles sigue siendo de 76, pero ya se permite participar en las pruebas absolutas, donde están a 84. "En chicos la altura va creciendo gradualmente, nosotras solo tenemos dos alturas y yo estoy ahora con la de 76", explica Paula González. Con todo, ya ha hecho sus pinitos con la valla a la altura absoluta: "Solo lo hice por probar, porque todavía no es mi altura, pero me demostró lo importante que es la técnica, porque las sensaciones cuando estás sobre la valla son totalmente diferentes".
Tras el quinto puesto en el Nacional, la avilesina ya compitió en las pruebas de 100 y 300 metros vallas, y se ha hecho con la mínima para el Campeonato de España al aire libre, su próximo objetivo. "Es bueno haberlas conseguido ya, pasar esa incertidumbre para poder centrarme en preparar el campeonato", señala. Porque no se conforma con lo conseguido hasta ahora.
Actualmente entrena dos horas diarias, y acaba de comenzar a ejercitarse con otro entrenador, Jaime Fernández. "En mi categoría hay muchísima gente que está en centros de alto rendimiento, pero yo creo que no es el momento. Si te machacas en cadetes, no llegas a junior, creo que el deporte tiene una progresión lógica y siempre voy a trabajar de esa forma", afirma la joven.
Paula González ha querido tener unas palabras para su anterior entrenador, Enrique González, porque "sin él, no habría salido un campeonato de España tan bueno", y también al padre del técnico, Cándido González, que también la entrenó y que falleció hace unos meses: "Nos acordamos mucho de él, era un maestro".
Tampoco deja de lado los estudios. Todavía está en 3.º de la ESO, por lo que no ha elegido rama de estudios, pero ella ya tiene claro por donde tirar. "Voy a hacer el bachiller de Ciencias de la Salud, porque quiero dedicarme a algo relacionado con el deporte, como fisioterapia o algo así", explica González, que añade que quiere hacer del deporte su trabajo: "Un trabajo es a lo que te vas a dedicar toda la vida, no quiero hacer algo que no me guste".
