Las oficinas de empleo de la comarca del Caudal tenían el pasado mes de mayo inscritos a 6.489 demandantes de trabajo. Los planes de empleo promovidos por los ayuntamientos se han convertido en pequeños oasis laborales en los que cientos de parados intentan encontrar una solución transitoria a su complicada situación. El problema es que hay muy poca agua para saciar tanta sed. Los consistorios se están viendo desbordados con centenares de solicitudes para unas pocas decenas de empleos. Las pruebas de selección se están convirtiendo, debido a su masificación, en angustiosos exámenes en los que se están dando situaciones que rozan lo esperpéntico.

El Ayuntamiento de Mieres convocó ayer a los 312 candidatos para la selección de los 12 puestos de peón incluidos en el nuevo plan territorial de empleo. Los aspirantes -que ya pasaron un primera criba en la que se excluyeron 377 solicitudes al no cumplir los requisitos establecidos en las bases de la convocatoria - fueron sometidos a un prueba para establecer sus habilidades. Por turnos, tuvieron que demostrar su pericia con la azada. Una pequeña finca pública situada en las inmediaciones del parque de Bomberos de Vega de Arriba sirvió de recinto para el ejercicio. En apenas unos minutos los desempleados tuvieron que jugarse parte de sus posibilidades de empleo bajo la supervisión de los evaluadores municipales. «Supongo que esta prueba puede ser buena para excluir a quien no sabe utilizar los instrumentos de trabajo, pero en unos minutos no pueden valorar quien es mejor», explicaron a este diario dos de los demandantes de empleo tras realizar la prueba con la azada.

El Consistorio mierense ha recibido 1.160 solicitudes para las 35 plazas que ofrece en total en el plan de empleo. No se trata de un hecho aislado. En el Consistorio de Cabañaquinta se dieron cita ayer unos 150 desempleados para pasar la primera prueba para acceder a los tres puestos de peón que oferta el Ayuntamiento de Aller. Sumando ambos planes de empleo, un total de 850 personas se han movilizada para cubrir 15 puestos de peón en Mieres y Aller.