No tengo ni idea, y tampoco me importa, de cómo ha sido la actuación de ese chaval de Candás al que han detenido por supuesto terrorismo. Lo tendrán que decir los jueces. Por lo que se sabe hasta ahora le acusan de quemar un cajero. Nunca entendí que placer puede haber en quemar un cajero, un contenedor ni nada por el estilo. Tampoco creo que sea una forma válida de protestar ni de reivindicar nada. Me da igual si él (no voy a dar nombre) ha quemado o no un cajero. Si lo ha hecho debe ser castigado que para eso están las leyes. Lo que no me parece de recibo es el operativo que se montó. Les detienen, a él y a ella, en Candás y sin mediar palabra los trasladan a Madrid para declarar en la Audiencia Nacional. Un viaje en balde, porque tras prestar declaración ya no les acusan de terrorismo con lo que ya no les va a juzgar la Audiencia Nacional. ¿No sería más fácil que primero declaren y, si hay indicios de terrorismo, se les traslade a Madrid?, sé que no es así pero se ahorraría gasofa.