El Partido Popular pidió ayer la intervención del Principado de Asturias para reabrir el paseo marítimo que une Candás con Perlora y que permanece cerrado desde hace siete meses como consecuencia de un desprendimiento sobre la carretera. El argayo motivó también el desalojo de una vivienda, cuyos inquilinos permanecen fuera de casa.
A petición del PP, la Consejera de Fomento del Gobierno regional deberá responder en la Junta General del Principado por su papel en el cierre prolongado del paseo y, sobre todo, acerca de cómo se formalizó la cesión del paseo al Ayuntamiento, en 2010, puesto que los populares han arrojado dudas sobre su legalidad. Y es que un acuerdo plenario obligaba a que la aceptación de la carretera se realizase de forma condicionada a la reparación de las laderas del vial, la AS-239, que finalmente no se cumplieron y que han derivado en que sea ahora el municipio el que deba hacer frente a los posibles gastos que se deriven de su reparación y su reapertura.
El PP reclama "que nos digan qué planes tiene el Principado porque la mayor partida de carreteras en los presupuestos de este año es para arreglos de baches y limpieza de vías", según explicó ayer el secretario regional de los populares, Fernando Goñi, quien visitó la zona afectada por los argayos junto a integrantes de la agrupación local. Goñi manifestó que "la situación de Candás es prioritaria", por cuanto "hay una familia que se encuentra fuera de su hogar desde hace siete meses y los vecinos no pueden entrar ni salir en coche a Candás". A su juicio se trata de una situación límite que requiere la intervención del Gobierno regional. "Esto no puede seguir así", proclamó.
A su vez, el portavoz del PP en Carreño, José Ramón Fernández, señaló que "si el Ayuntamiento no ejerce sus competencias, el Principado, como mínimo, debería preguntar por qué no se hace nada".
