Arcelor Mittal continuará con la actividad en la planta de escorias de Tabaza, desbaratando las directrices del plan urbano aprobado por Carreño en 2011, que pretendía cambiar la calificación de suelo de la zona. La consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente ordenó ayer la ejecución de una sentencia del Tribunal Supremo que deja sin efecto la nueva calificación, aprobada en su día por el Ayuntamiento y por la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias (CUOTA).

El Principado reproduce la sentencia judicial, que exhibe la "parcial disconformidad a derecho del Plan General de Ordenación Urbana de Carreño" en lo referente a dos áreas de Tabaza, lo mismo que sucede, según reza el fallo, con "la previsión de cambio de uso que impide actividades propias de la planta de tratamiento de escorias allí existente, además de la previsión contenida en el plan en relación al uso público de los viales privados que, transcurriendo por los terrenos privativos de la recurrente, dan acceso a la factoría".

Tanto la sentencia judicial del Tribunal Supremo como la orden del ejecutivo autonómico no supondrán la paralización del plan urbano, aseguró ayer el Ayuntamiento de Carreño, pero sí elimina la distinción entre zonas industriales y residenciales en el área de Tabaza.

Otras dos demandas

Se trata tan sólo de una de las tres demandas judiciales conocidas que ha generado el último plan urbano de Carreño, aprobado por la CUOTA de forma provisional en 2011 y de forma definitiva hace pocos meses. Otra demanda trata de impedir las restricciones en la edificabilidad de las viviendas en numerosas parcelas de la parroquia de Perlora y está aún por resolver, mientras que una tercera relativa a las propiedades de la conservera Albo ya ha sido fallada de forma favorable al Ayuntamiento. La empresa afincada en Vigo pretendía construir edificios en la vieja fábrica de Candás.