Sustraen un coche de un garaje de Piñeres tras violentar seis portones

La comunidad de vecinos de los chalés adosados de la calle Piñeres fue víctima de un robo en la noche del domingo al lunes. Los ladrones lograron llevarse un vehículo de la casa número 15 tras violentar seis portones, según los afectados. La Guardia Civil, que está investigando los hechos, tiene constancia de cuatro robos por el momento. Los amantes de lo ajeno se hicieron con un Nissan Micra gracias a que su propietario había dejado las llaves puestas dentro del utilitario, lo que les facilitó el trabajo.

A última hora de la tarde de ayer, la Benemérita seguía recabando datos. Por el momento no hay ningún detenido.

Todo ocurrió en plena noche, cuando los residentes en los chalés de esa zona residencial de Candás estaban durmiendo. Los ladrones actuaron con sigilio, ya que ninguno de los vecinos sintió ruidos sospechosos. Al parecer, según relató el propietario del turismo sustraído, los cacos accedieron por una de las tres salidas de emergencia que comunican la cochera con el exterior. Una vez dentro, violentaron la cerradura de seis de los 23 portones que se encontraron para lograr el que, al parecer, era su propósito: hacerse con un vehículo. A este botín hay que sumar otros objetos de valor que había dentro del Nissan, así como 200 euros.

El propietario del coche comentó que se dio cuenta del robo a las siete menos diez de la mañana, cuando se disponía a ir a su puesto de trabajo. En ese momento, alertó a la Guardia Civil, que acudió a la zona alrededor de las ocho de la mañana. Más tarde se personaron agentes de la Policía Judicial para tomar muestras y esclarecer el asunto cuanto antes.

Las autoridades comentaron en ese momento, según dice el vecino más afectado, que los ladrones habían usado una especie de barra tipo destornillador para forzar tanto la puerta de salida de emergencia como los portones. Afortunadamente, los ladrones no intentaron acceder a las viviendas. Y es que los garajes están directamente comunicados con los chalés. La comunidad de vecinos convocó ayer una reunión de urgencia y acordó cambiar las tres puertas de emergencia por otras más robustas.