Las carreteras asturianas están llenas de maleza. Una vegetación que crece con fuerza en días de calor y que colapsa las cunetas y se extiende ya por el firme de las vías. Unas condiciones que complican la conducción en vehículo y que suponen también un riesgo para los ciclistas que ruedan por las vías locales y regionales. Está previsto que los trabajos de limpieza en las carreteras autonómicas comience a finales de mes con la contratación que está realizando el Principado de Asturias para iniciar los desbroces, con una dotación económica de 4,9 millones de euros para actuar en 2.814 kilómetros en 229 vías.
Un ejemplo del mal estado de las carreteras lo da la vía entre Grado y Pravia que pasa por Candamo. Los bardones crecen hacia el pavimento dificultando la visibilidad y, en algunos casos, la maleza supera los dos metros de altura. "Está todo comido por la maleza y hace falta que den una pasadina porque hay sitios muy complicados", señala José Luis González Cañedo, de la panadería San Pelayo, de Grado, que recorre la comarca con las furgonetas de reparto.
También en la panadería El Valle, de Pravia, hacen a diario entregas de pan por la zona. "Los chicos no se quejan, están ya acostumbrados a ir por las carreteras estén como estén", comenta resignada María Arias. Además, los conductores que habitualmente están en la vías regionales, como González Cañedo, apuntan a la necesidad también de limpiar los tramos urbanos. "Entiendo que con el parón por todo lo del covid-19 vamos con retraso, pero hace mucha falta que se limpie", puntualiza.
También afecta a los ciclistas, que aprovechan la primavera y el verano para rodar por las carreteras asturianas. La creciente maleza les perjudica y les pone en peligro. "Está peligrosísimo, hay zonas donde el segao llega al medio de la carretera", dice Chema González, de Grado, quien alerta a los compañeros de la mala situación de las vías: "hay que tener mucho cuidado porque además yo nunca vi tantos ciclistas por ahí, hay el doble de gente".
Lo cierto es que pronto comenzarán los trabajos, en cuanto el Principado adjudique todos los contratos. Así, destinan un 26,4 por ciento más de dotación económica respecto a 2019 y contarán con los 29 tractores-desbrozadores de la flota autonómica, a los que se sumarán otros 40 vehículos para la limpieza total de las vías asturianas.
