El presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Langreo, Vicente Gutiérrez Solís, pidió que "se busque algún contenido" para "aprovechar las actuales estaciones de Feve en Sama y La Felguera", una vez que sea reemplazadas como consecuencia del proyecto del soterramiento de las vías. La obra incluye la puesta en marcha de dos nuevas estaciones. La de La Felguera será subterránea, estará a la altura de Valnalón y sustituirá a la de Vega. En Sama, el nuevo apeadero se emplazará junto al IES Jerónimo González y relevará a la instalación existente ahora a la altura del puente atirantado del Corredor.
"Habrá que ver qué planes tiene el Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias), pero creo que se trata de dos locales muy buenos a los que se les puede encontrar nuevos usos, ya sea como centros vecinales, culturales, de asociaciones o para otras utilidades", argumentó Gutiérrez Solís, que añadió: "Los dos inmuebles están ubicados, además, en zonas céntricas y tienen una tipología muy característica que valdría la pena conservar".
La obra civil de soterramiento, con la excavación del falso túnel y la finalización de las nuevas estaciones, finalizará en septiembre. Esta fase fue ejecutada por el Principado, que adelantó el dinero al suprimirse los fondos mineros. La previsión ahora es que los trenes de la antigua Feve circulen por el tramo soterrado de Langreo a principios del año 2019. El Ministerio de Fomento, a través del Adif, dedicará 20 millones a instalar las vías, la catenaria y la señalización. Para ello, se destinará lo que resta del año a ejecutar el proyecto técnico de la denominada superestructura con el objeto de licitar la obra en el primer trimestre de 2018 y empezar a ejecutarla en la segunda mitad del año. El coste estimado por el Adif para llevar a cabo la obra que permita culminar el soterramiento es de unos 20 millones de euros.
Urbanización
La superestructura incluye la colocación de las vías, traviesas, catenarias, señalización, sistemas de seguridad y el resto de elementos necesarios para permitir la circulación de los convoyes. Tras esta actuación sólo quedará urbanizar los terrenos liberados por las vías para culminar el proyecto. Esta parte final de la obra supondrá un desembolso de unos 14 millones. El gobierno local de Langreo ya expuso que el Principado debe hacerse cargo de esa urbanización, que debe afrontarse de forma "ambiciosa". El Alcalde, Jesús Sánchez, argumentó que "vamos a ser exigentes y ambiciosos con la urbanización, porque queremos un plan que vaya más lejos de los que puede ser la adecuación de los terrenos liberados".
El Ayuntamiento pedirá al Gobierno regional que aproveche la ocasión para ejecutar un PERI (Plan Especial de Reforma Interior) que incluya intervenciones de mejora del entorno como el derribo de viviendas ruinosas o la recuperación de espacios degradados, una intervención que, según el gobierno local, los habitantes de la zona merecen "después de la paciencia que han tenido para soportar todos los trastornos ocasionados por las obras". La intención del Ayuntamiento es que este plan afecte especialmente al barrio del Puente, uno de los más castigados por los trabajos de soterramiento.
