El Ayuntamiento de Mieres acaba de iniciar los trámites para la convocatoria de una oferta pública de empleo que permita cubrir parte de las numerosas vacantes que se han generado dentro de la plantilla municipal. Los técnicos que se encarguen del procedimiento se enfrentarán a un proceso administrativo posiblemente olvidado. Y es que el Consistorio lleva casi dos décadas sin convocar una oferta pública de empleo. La última realizada se remonta a 1999.
Catorce son las contrataciones que el Ayuntamiento de Mieres pretende realizar. La planificación fue ayer trasladada a los sindicatos. Se trata de un puesto de aparejador, dos oficiales electricistas, un fontanero, un palista, un jardinero y ocho operarios. Son destinos que han quedado vacantes a lo largo de este año. "Al haber incumplido la regla de gasto en 2016 , no ha sido posible abordar antes esta renovación de la plantilla y la tasa de reposición imposibilita extenderla", explicaron ayer fuentes municipales.
El oferta pública de empleo que en breve pondrá en marcha el Ayuntamiento de Mieres llega justo después de que los catorce seleccionados para cubrir las plazas de contrato relevo hayan comenzado a trabajar. Así finalizó un largo procedimiento, que comenzó con la negociación con los representantes sindicales de la plantilla. La convocatoria, explicaron desde el gobierno local, se impulsó para avanzar en la reorganización municipal, rejuvenecer la plantilla y ofrecer esta alternativa a las personas que afrontan los últimos años laborales en el Consistorio y que querían sumarse a la jubilación parcial. Ahora, con la oferta público de empleo los gestores municipales parecen avanzar ya con paso firme en una nueva política de personal.
Casi veinte años han pasado desde que el Ayuntamiento de Mieres asumiera por última vez incorporaciones basadas en los principios de igualdad, mérito, capacidad y publicidad. Entre los años 2004 y 2010 hasta 41 trabajadores lograron entrar en el Ayuntamiento para quedarse a través de los polémicos contratos relevo. Simplemente, cuando llegó el momento de la jubilación del veterano trabajador sustituido se quedaron con sus puestos, sin que se convocase una oferta pública de empleo. No es un procedimiento ilegal, pero si anómalo, según juristas consultados por este diario.
