El almacén de productos sanitarios en el pozo Santiago no es el primer proyecto que planea sobre las clausuradas explotaciones de Hunosa. El sindicato SOMA lanzó hace unos meses otra idea para los pozos de las cuencas mineras: crear centros de almacenamiento de "big data" (datos informáticos). Los responsables de la central señalan que ya existen en otros países europeos. También está sobre la mesa la posible conversión de la térmica de La Pereda en una planta de biomasa.
"Ya existe un almacén de 'big data' en una mina de Maloy, en Noruega. Si allí se puede, ¿por qué aquí no? Sería cuestión de estudiarlo", señaló en la celebración de unas jornadas el secretario general del SOMA, José Luis Alperi. De hecho, ese almacén de datos informáticos es uno de los mayores existentes en el mundo.
Otra iniciativa puesta sobre la mesa cuenta con la participación del Cluster TIC de Asturias. Se trata de un proyecto europeo con empresas de otros siete países para poner en marcha centros de investigación en galerías mineras. La iniciativa, que en un futuro también podría ser extrapolable a minas de la región, busca este tipo de instalaciones subterráneas por motivos de seguridad y por sus condiciones ambientales. Principalmente, por su estabilidad térmica.
Los planes no se quedan en los pozos sin uso. También está en marcha la reconversión de la térmica de La Pereda. La hullera pública tiene puesta la vista en el primer semestre de 2022 para el inicio de la quema de residuos madereros propios y ajenos. Será tras una rápida transformación desde la combustión de carbón y estériles de mina a residuos ecológicamente más aceptables.
