El Banco de Alimentos de Asturias, ubicado en el polígono morciniego de Argame, afronta un año complicado. Y es que verán reducidos en un 45 por ciento los fondos europeos, lo que supone casi medio millón de kilos de comida menos para los que tendrán que buscar soluciones alternativas. Este recorte no es nada desdeñable, más cuando la entidad moviliza 1,9 millones de kilos al año. Ante este panorama, el presidente del Principado, Adrián Barbón, que visitó ayer las instalaciones, hizo una llamada a la solidaridad para que colectivos y empresas colaboren con el Banco de Alimentos de Asturias.
Barbón fue recibido en Argame por el presidente de la entidad, Bernardo Sopeña. Este último dio explicó que en 2020, el año de la pandemia, “fue increíble la solidaridad que encontramos”. Sin embargo, un año después, “la gente bajó la guardia, parecía que la pandemia había pasado y que las necesidades habían disminuido, pero no es así, las necesidades a consecuencia del coronavirus persisten”. A esto se le ha sumado el ciado recorte de los fondos europeos, “que han disminuido en un 45 por ciento y suponen casi medio millón de kilos de comida que no vamos a recibir. Tendremos que compensarlo con ayudas o como sea, porque nuestra intención es que se puedan realizar todos los repartos que tenemos previstos para el presente ejercicio”.
La entidad ha conseguido hacer el primer reparto de este año y tiene fijado el segundo para el mes de marzo, que supone una inversión de 140.000 euros, “y viendo que los fondos se acaban, tenemos que dar un toque de atención a la solidaridad y generosidad de los asturianos, tal y como lo tuvimos en el año de la pandemia”. Coincidió en este punto el presidente del Principado, quien destacó además la importancia de los voluntarios del Banco de Alimentos de Asturias “que están echando muchas horas”, así como de las empresas y colectivos que ya colaboran con la entidad”. Pero no es suficiente, “movilizan 1,9 millones de kilos al año, llegando a una población de casi 20.000 personas, gracias a una muy importante labor para erradicar el hambre en Asturias, por eso invito a otros colectivos y empresas para que colaboren con el Banco de Alimentos de Asturias”.
La visita del presidente del Principado coincide con la celebración del 25 aniversario del Banco de Alimentos de Asturias, que realizará un acto conmemorativo el próximo mes de junio, cuando se cumple ese cuarto de siglo. Sin embargo, no será la única de las actividades programadas, como apuntó Sopeña. “La verdad que ha sido una coincidencia la visita de Adrián Barbón, porque se iba a hacer el año pasado pero al final no pudo ser y se pospuso hasta ahora”, destacó. Sobre las celebraciones del aniversario, el presidente del Banco de Alimentos de Asturias destacó el acto de junio en el que se presentará, además, el nuevo logotipo de la entidad. “Queremos que sea un acto institucional donde participen todos aquellos que colaboran con nosotros, como el Principado, pero también los socios y patronos honoríficos”. Asimismo, se organizará una marcha solidaria en la que participarán todos los voluntarios del Banco de Alimentos de Asturias, que realizarán un tramo del Camino de Santiago con el objetivo de “hacer más visible al Banco de Alimentos de Asturias y su aniversario”. También quieren programar un concierto, aunque todas estas actividades se desarrollarán a partir del mes de septiembre.
Desde 2017
El Banco de Alimentos de Asturias opera desde el polígono industrial de Argame desde julio de 2017, cuando inauguraron estas instalaciones. La nave en el parque empresarial morciniego, de 2.000 metros cuadrados, ocupa la mitad que la que tenían con anterioridad aunque resultaba más que suficiente para albergar sus reservas de alimentos; además, al ser un espacio más recogido, tampoco precisaban del mismo volumen de voluntarios y podían organizarse mejor. Además, para poder instalarse en Argame se abordaron una serie de mejoras, como la renovación de sistema de iluminación o la redistribución de los espacios. Para ello también contaron ayudas, como la de la Fundación EDP, que sufragó la nueva instalación de la nave ahorrando una factura de unos 17.000 euros.
