El primer escudo del Sporting del que se tiene constancia en los archivos del club, aunque no llegó a oficializarse nunca, no fue bordado en las camisetas ni impreso en papel oficial, data de 1912 y su corona fue revisada para incluir la de la Casa Real Española. Ese mismo año de 1912, Alfonso XIII, bisabuelo de Felipe de Borbón, aceptó la Presidencia de Honor del club, que pasó a llamarse Real Sporting de Gijón. El monarca se encontraba en Gijón invitado por García Sol, entonces presidente del club de Regatas, y la junta directiva del Sporting que presidía Anselmo Solar le presentó la solicitud por escrito que fue aceptada. A cambio, Alfonso XIII le entregó al club una copa. Más tarde remitiría una fotografía suya como obsequio. También el Club Astur de Regatas adquirió la condición de Real. También la ostentan el Grupo de Cultura Covadonga y el Club de Golf de Castiello, una de las últimas presidencias de honor que aceptó Juan Carlos I.
Desde esa fecha, el Sporting ha mantenido la condición de Real durante toda su historia y sus sucesivos escudos han mantenido la corona. Con un único paréntesis durante la Segunda República Española (que fue proclamada el 14 de abril de 1931 y duró hasta el 1 de abril de 1939, fecha en que concluyó la Guerre Civil Española dando paso a la dictadura de Franco). Durante esta etapa de la historia de España fueron denostados todos los símbolos vinculados de alguna manera a la monarquía. El Sporting, que no puede ser ajeno a los distintos cambios políticos, se ve obligado a modificar su escudo. La corona Real española se sustituye por una corona mural, una especie de muralla almenada. Además, la forma del escudo pasa a ser redonda.
Tras la guerra civil, el Sporting recupera la normalidad con la corona, que reaparece en el escudo rojiblanco. El club recupera la denominación de Real. Sin embargo, el nuevo régimen también afecta al club gijonés. En 1941, el nuevo poder político prohíbe los extranjerismos. El Sporting pasa a denominarse Real Gijón y así se mantendría hasta los setenta. El escudo cambia de nuevo y adquiere forma triangular formando una especie de letra G.
Tras la coronación de Juan Carlos I como Rey de España el 22 de noviembre de 1975, el nuevo monarca hereda de su abuelo la presidencia de honor del Sportiing. El nuevo monarca le dio suerte al club gijonés que vivió la época más dorada de su historia, con dos finales de Copa, un subcampeonato de Liga y la disputa de la Copa de la UEFA en seis ocasiones.Con la coronación ayer de Felipe VI se produce un nuevo cambio en la presidencia de honor del club. Juan Carlos de Borbón pierde ya cualquier vinculación con el Sporting, puesto que la presidencia de honor va asociada a la corona.
No es la primera vez que Felipe de Borbón entra en relación con el Sporting. El entonces Príncipe de Asturias aceptó en 2005 la presidencia de honor del centenario rojiblanco. Su Alteza Real aprovechó la celebración de los Premios Príncipe para dar una recepción en Oviedo a una delegación rojiblanca que presidió Manuel Vega-Arango y de la que formaban parte los directivos, los futbolistas, el cuerpo técnico y hasta los representantes de las peñas. Ayer, Felipe VI se convirtió en el nuevo Presidente de Honor del Sporting.
