Muy caros pagó sus errores el Unión Popular de Langreo ante el filial del Atlético de Madrid. Dos pérdidas en la salida del balón que costaron un gol y una expulsión, que acabaría determinando el partido. Pese al dominio mostrado, los azulgranas aún no han estrenado su casillero de puntos. Y la próxima semana, otro filial, el Castilla.

El partido arrancó sin demasiadas ocasiones, aunque en los primeros minutos el Langreo dominaba la pelota. Sin embargo, un fallo en la salida del balón provocó una recuperación de Riquelme, que dejó el balón para que Tropi lanzase un derechazo desde fuera del área que se coló pegado al palo derecho de Adrián Llano. A partir de ahí, los rojiblancos, ayer de negro, dominaron, aunque sin ocasiones.

En el segundo tiempo, el Langreo salió más metido, y la entrada de Carrecedo y Jorge Hernández dio más profundidad al equipo. Sin embargo, en el minuto 77, Adrián Torre perdió el balón en la salida, y Alain no tuvo más remedio que derribar a un rival fuera del área que se quedaba solo y a puerta vacía. Roja y uno menos. Lejos de venirse abajo, el Langreo consiguió el empate gracias a una gran jugada de Jorge Hernández que remató Marc Nierga en el 80. Poco duró la alegría. Sanabria se sacaba en la jugada siguiente un zapatazo desde 30 metros a la escuadra de Adrián Torre. Con el 1-2, el Atlético tiró de picaresca y el partido agonizó sin posibilidad de empatar para los azulgranas.