Sabor asturiano en el estreno de España en la Eurocopa femenina. Lucia García fue parte fundamental del triunfo del combinado nacional en su debut ante Finlandia, anotando el tercer gol que dio tranquilidad a las de Jorge Vilda y que permite disipar las dudas que rodeaban al equipo español tras la lesión de Alexia Putellas.

La Roja es una de las grandes favoritas a la conquista del título y su debut se esperaba con ansia, pero todas las expectativas volaron por los aires a los cincuenta segundos, cuando Sällström capturó un pase largo a espalda de las centrales y anotó mediante un tiro cruzado que tocó en un palo antes de entrar. De todos los guiones posibles ese era quizás el más improbable y por ello a España le costó algunos minutos asimilar el revés. Fueron compases en los que el dominio de la posesión, una constante, no traía consigo claridad en los metros finales. Únicamente Leila, con un centro-chut que tocó en el larguero, amenazó de verdad.

Así las cosas, el balón parado pasó a convertirse en un arma efectiva para España. Cada saque de esquina, sobre todo los servidos al primer palo, generaba incertidumbre. Y con el noveno, llegó el tanto del empate gracias a un cabezazo inapelable de Irene Paredes en el área pequeña.

El tanto supuso un empujón anímico para la Roja, la confirmación de que insistir por el camino que había tomado era la mejor receta para el éxito. A partir de ese momento se vio un juego más coral, un equipo alegre que a base de insistir terminó poniéndose por delante cuando Mapi León se incorporó a zona de tres cuartos y sirvió una entrega medida al punto de penalti que remató por vía aérea Aitana Bonmatí, con dedicatoria especial para Putellas, presente en la grada.

Conseguido lo más difícil, la segunda mitad parecía el escenario ideal para disfrutar con la mejor versión de España. Y no decepcionó lo visto pese a la falta de pegada, con mayor presencia ofensiva de las laterales y llegadas desde segunda línea.

Dentro de esa dinámica, Ona Batlle disfrutó de un mano a mano que desvió bien Korpela. No fue la única vez en la que tuvo que intervenir, ya que también se exhibió para desbaratar un cabezazo de Aleixandri.

A España le faltaba, sin embargo, un gol más para evitar sustos y acabó llegando a manos de la asturiana Lucia García. La de Pola del Pino conectó un cabezazo a centro de Mapi León que demuestra que no de solo del juego raso vive el equipo español. Caldentey, de penalti con el tiempo cumplido, culminó la faena.

Exhibiendo su idea, en un día en el que los nervios iniciales podían suponer un impedimento para ello, España se estrenó con victoria e hizo los deberes en vísperas de enfrentarse en la fase de grupos a Alemania y Dinamarca.