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Los trabajadores de Arcelor rechazan que la medida condicione el convenio

Las centrales prevén que la siderúrgica use el ajuste de producción como excusa para oponerse a subir los salarios por encima del 3%

Los trabajadores de Arcelor rechazan que la medida condicione el convenio

La dirección de Arcelor-Mittal tendrá que mover ficha esta semana en la negociación del futuro convenio colectivo de la multinacional. Será el primer encuentro entre ambas partes después de que este lunes la multinacional anunciara que tiene previsto aplicar un importante ajuste de su producción en sus plantas asturianas. Los representantes sindicales temen que la compañía pueda utilizar ese tijeretazo como argumentario para justificar que los salarios no suban al nivel que reclaman las centrales. Advierten que no permitirán que se mezcle ese recorte, que ven como algo coyuntural, con la negociación del convenio.

Como si de una partida de ajedrez se tratara, en la reunión que tendrá lugar mañana le toca mover pieza a la empresa. Los sindicatos presentaron hace unos días una revisión a la baja de sus pretensiones salariales. Exigen ahora un incremento de las nóminas del 3% para este año, del 3,5% para el que viene y del 4% para 2021. Las posturas están alejadísimas, ya que Arcelor quiere limitar esa mejora de los sueldos al 0,8% para este año y el próximo, y del 1% en 2021. Las demandas de ambos están a años luz.

"No se nos escapa que van a querer aprovechar la coyuntura", aseguró el portavoz de CC OO, José Manuel Castro. No obstante, los sindicatos aseguran que tienen sus armas para tratar de frenar las posibles nuevas exigencias de la compañía. Entre ellas, por ejemplo, que la demanda de acero en Europa crece, expone Castro, y, encima, en suelo europeo no hay suficiente capacidad para abastecer a todos los clientes. A su favor, presumen los sindicatos, también juega que la multinacional publicará mañana mismo los resultados del primer trimestre, que se prevén muy buenos. "Los datos son muy tozudos", insistió José Manuel Castro.

Raúl Cueto, portavoz de UGT, aseguró que "suponemos que la compañía querrá utilizar el recorte de producción para no proponer una subida muy elevada de los salarios". Aunque, en la misma línea, señala también que los sindicatos van a exponer que hay números de sobra que justifican que las nóminas deberían de poder subir con soltura durante los próximos años después de bastante tiempo con el cinturón apretado por los efectos de la crisis.

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