El gijonés Oswaldo Suárez será el encargado de pilotar las multimillonarias inversiones que ArcelorMittal realizará para descarbonizar su actividad en España durante los próximos años. Su trabajo consistirá en guiar a la compañía por este nuevo camino en el que se incluye la construcción de una nueva planta de reducción directa de mineral de hierro (tecnología DRI) que alimentará a un futuro horno eléctrico que se instalará en Veriña (Gijón) y a los ya existentes en Sestao (Vizcaya). El objetivo es que las plantas españolas reduzcan sus emisiones contaminantes a la mitad en 2025. Para ello la multinacional invertirá, de primeras, mil millones de euros.
Suárez asumirá su nueva responsabilidad a partir del 1 de septiembre. Para ello dejará la dirección del conocido como Clúster Asturias, paraguas que aglutina la gestión de las plantas de Gijón y Avilés, además de la de la de Lesaka en Navarra, la de Sagunto en Valencia y la de Etxebarri en el País Vasco. Su puesto lo ocupará el francés Philippe Meyran, que tiene también una larga trayectoria en la siderúrgica en España. Suárez tendrá que informar a partir de septiembre de la marcha de estos multimillonarios proyectos al vicepresidente de ArcelorMittal y jefe de operaciones de productos planos de la multinacional en Europa, Marc Vereecke. Las inversiones de Arcelor suponen un hito en la transformación de la compañía y garantizan su continuidad en Asturias durante décadas. La siderúrgica tiene la intención de comenzar de inmediato con la construcción de la nueva planta de DRI.
El hueco que deja Suárez al frente del Clúster Asturias lo ocupará Philippe Meyran. Es un buen conocedor de las plantas asturianas de la multinacional. Fue director de operaciones de acabados y servicio al cliente del Clúster de Asturias y también director de tecnología de la división de negocio Suroeste en Europa del gigante industrial. Un cargo que había ocupado también Suárez.
