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El paro del transporte cobra fuerza en Asturias con el apoyo de Cesintra

El sector avisa de que la protesta de los camioneros del lunes tendrá más seguimiento del previsto y los empresarios temen piquetes

Un camión circula por una estación de mercancías, en una imagen de archivo. | EP

El sector del camión está dividido ante el paro indefinido convocado este lunes 14 de marzo por la Plataforma en Defensa del Sector Transporte, pero la movilización va cogiendo fuerza. Dos de las tres organizaciones asturianas mayoritarias en el sector (Cesintra y UITA) secundan la protesta y solo Asetra, principal patronal en el Principado, se opone. Cesintra, que hasta ahora estaba en contra del paro impulsado por la Plataforma, cambió su postura y recomienda a sus asociados no trabajar a partir del lunes. Los organizadores en el Principado, que se están coordinando a través de redes sociales, niegan que se estén convocando piquetes. Algo sobre lo que son escépticas las grandes empresas, que ya han trasladado a Delegación de Gobierno su preocupación y las ubicaciones en las que, temen, se corten carreteras.

Según los documentos a los que ha tenido acceso este periódico, varias compañías de la región han alertado a las fuerzas de seguridad de distintos “puntos calientes”. En el Principado los ubican en los polígonos de Asipo y Silvota (Lugo de Llanera) y Sierra de Granda (Siero). Delegación de Gobierno confirma estar “alerta” ante posibles movilizaciones con el objetivo de “salvaguardar los servicios esenciales”.

En Asetra señalan que, aunque ellos no secundan el paro, muchos de sus socios sí van a quedarse en casa. Algunos transportistas aseguran que lo hacen “por miedo” a la respuesta de los huelguistas que, a su vez, reiteran que será un paro “pacífico”. El presidente de Asetra, Ovidio de la Roza, que durante años presidió el Comité Nacional de Transporte por Carretera y continúa al frente de la Confederación Española de Transporte de Mercancías, cree que la huelga “tendrá un apoyo importante”. “La gente está muy cabreada y el caldo de cultivo hace posible una movilización de este tipo”, reconoce. Su organización, asegura, es coherente y no se sumará a los paros tras discutirlos en las asambleas territoriales. A su juicio, el Real Decreto publicado en el BOE el pasado 1 de marzo recoge avances muy positivos y cree que la vía para salir de una situación “muy dura” es el diálogo con el Ministerio de Transportes, unas conversaciones que ya están en marcha a través del Comité.

La Plataforma exige a su vez a la Ministra de Transportes, Raquel Sánchez, que establezca una mesa de negociación con ellos para tomar medidas que palien el sufrimiento del sector.

La titular de la cartera ya ha manifestado que su único interlocutor es el propio Comité, un organismo contra el que cargan fuertemente desde la organización convocante de los paros, que los acusa de estar al servicio de las grandes empresas y del propio Gobierno. El presidente de UITA, José Fernández, representante de la Plataforma en Asturias, al ser preguntado por los mensajes de los grupos que están gestionando la huelga y llamando a realizar piquetes, defiende que él no tiene “control” sobre esos grupos y garantiza que “no habrá piquetes agresivos”. Los organizadores de la protesta explican que sus reivindicaciones son justas y se basan en un alza de los precios de los carburantes, un input que supone cerca del 30% de los costes del sector. El precio de los combustibles registra incrementos del orden del 43% desde antes de la pandemia y una volatilidad que no permite realizar planes de negocio.

El presidente de Cesintra, la segunda organización con mayor número de asociados en Asturias, Alejandro Mojardín, justifica el cambio de postura de su organización en los inasumibles costes de los carburantes. La entidad está integrada en Fenadismer, una de las patronales mayoritarias que forma parte el Comité Nacional del Transporte y que el viernes se desmarcó de la huelga optando por no posicionarse en ninguno de los dos bandos. Mojardín denuncia que las negociaciones en el seno del comité están siendo “infructuosas” y por ello apoya esta vía de presión.

El 95% del movimiento terrestre de mercancías en España y el 70% de las exportaciones a Europa se realizan por carretera a cargo de 360.000 camiones, explican fuentes patronales. Se trata de un sector estratégico. Ante las dudas de un seguimiento que, contra las primeras impresiones de las patronales del transporte, parece que será amplio queda ver cómo se resuelve el pulso entre transportistas y Gobierno.

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