A las puertas de la precampaña electoral, la dimisión del primer ministro Alexis Tsipras y la ruptura de su partido han abierto una brecha en Podemos, que trata de frenar el contagio y de defender al exmandatario griego de los ataques del sector radical de la formación morada.

La líder andaluza Teresa Rodríguez y el exdirigente Juan Carlos Monedero no dudaron en utilizar la crisis de Syriza para lanzar advertencias a Pablo Iglesias. Rodríguez confesó que le "aterroriza el temblor de piernas de Tsipras tras haber conseguido un no claro de la ciudadanía" a las medidas de la troika. Además, expresó su temor a que lo ocurrido en Grecia pueda suceder también a los dirigentes de Podemos. "Para evitarlo hay que tener un plan", dijo.

Más duro, Monedero apuntó que la decisión del líder de Syriza de tirar la toalla y optar por nuevas elecciones no le "emociona" porque invita a "votar en un escenario de resignación". "Tsipras ha cometido un error, y es que no puede ir a matar dragones con un cazamariposas", dijo.

"En Grecia se ha roto la unidad popular y eso no debe ocurrir en España", subrayó Monedero para insistir en que "Tsipras ve cómo su partido se ha roto y eso no puede ocurrir".

Ante estas críticas, Iñigo Errejón eludió explicar cómo afectará el caso griego a Podemos y descartó una escisión como la de Syriza. Sin embargo, el "número dos" de Pablo Iglesias se apresuró el viernes a afirmar que la dimisión de Alexis Tsipras es una lección de "coraje y responsabilidad".