La incertidumbre política, acrecentada hoy con la segunda negativa del Congreso a que Rajoy sea presidente del Gobierno, persistirá al menos hasta después de las elecciones vascas y gallegas del 25 de septiembre. Nada apunta a que los socialistas convoquen antes el Comité Federal, su máximo órgano entre congresos, y se abra la opción de replantearse el "no" taxativo al candidato popular.
El PSOE cierra filas en torno al rechazo contundente a Mariano Rajoy expuesto por su secretario general, Pedro Sánchez, en la segunda sesión del debate de investidura. Las voces que, en otras circunstancias, dejaban la puerta abierta a la posibilidad de un abstención de los diputados socialistas para desbloquear la situación institucional mutaron ayer en invitaciones a la reflexión interna pero sin sugerir soluciones.
El objetivo del líder socialista es ahora que esa posición no se resquebraje. Fuentes cercanas a Sánchez, citadas por la agencia Efe, se muestran convencidas de que "lo lógico" es respaldar el rechazo expuesto en el Congreso y anticipan que no habrá "barones" que se atrevan a pedir de forma abierta la abstención del PSOE ante el escenario de un nuevo intento de Rajoy de ser investido presidente del Congreso. De forma expresa, el portavoz parlamentario socialista, Antonio Hernando, dejó constancia ayer de lo "inconcebible" que sería que el Comité Federal acuerde un "cambio de criterio" respecto a lo defendido hasta ahora. Sólo el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, urgió ayer a que el órgano interno se reúna y debata qué hacer para evitar unas terceras elecciones en España.
Podemos y C's
A quienes sí se volvió a escuchar fue a los partidarios de que el PSOE explore la posibilidad de conformar un Gobierno alternativo al del PP. Al socaire de las invitaciones de Podemos y los nacionalistas a los socialistas para que se adentren en esa vía, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, animó a Sánchez a que piense en un acuerdo con el partido de Pablo Iglesias y Ciudadanos, algo que reconoce difícil de antemano, pero que conseguiría sumar 188 diputados, doce por encima de la mayoría absoluta. Iceta rechaza el "falso dilema" entre cuatro años más de Rajoy en la Moncloa o las terceras elecciones generales. "Quiero tanto a España que no quiero al PP cuatro años más. No lo hago por mi interés personal, lo hago por patriotismo", sostiene el secretario general de los socialistas catalanes, para quien "de forma muy amplia en el PSOE y en la sociedad española hay un deseo de cambio y alternancia en el Gobierno".
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ofrece al líder socialista para mediar y "contrastar" opiniones internas sobre la futura estrategia del partido, con vistas a la reunión del comité federal.
Podemos insistió ayer en la invitación al PSOE hecha la víspera por Pablo Iglesias para que lidere una alternativa a los populares. No hacerlo sería "una gran irresponsabilidad", según la portavoz adjunta de la formación morada en el Congreso, Irene Montero. El mensaje conminatorio venía envuelto en halagos al líder socialista, de quien Montero alabó el "coraje" de resistir a las "presiones de la "vieja guardia" de su partido y de "los poderes fácticos" para mantener el rechazo al "rey de la corrupción y de la desigualdad".
