La Fiscalía informó ayer en contra de la recusación del juez Manuel Marchena y los otros seis magistrados que componen el tribunal que juzgará el "procés" que ha solicitado el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, en prisión preventiva desde hace más de un año.

La defensa de Cuixart, que está procesado por rebelión, basa su petición en una sentencia de la justicia europea que consideró probada la parcialidad de una juez española en un proceso contra el líder abertzale Arnaldo Otegi y esgrime, para sostener su petición, el wasap en que el portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, se jacta de que el nombramiento de Marchena al frente del Supremo y del Poder Judicial, luego frustrado, permitiría tener controlada "desde detrás" la Sala que juzgará el "procés".

El fiscal Fidel Cadena señala que "presumir que los seis magistrados recusados (todos menos Marchena) son parciales por mera ósmosis y por extensión no sólo es contrario a la presunción de imparcialidad del juzgador (...) sino que carece de fundamento absoluto".