Nadie sabe, a ciencia cierta, por qué la Comunidad de Madrid ha pasado de ser la región con más casos de coronavirus de la UE a tener una incidencia por debajo de la media de España (328 casos por cada 100.000 habitantes frente a 504 a nivel nacional); pese a que su presidenta, Isabel Díaz Ayuso, ha remado contra viento y marea por imponer las mínimas restricciones, haciendo frente a la opinión de epidemiólogos y del Gobierno central. De hecho, Madrid mantiene los bares abiertos y es de las pocas autonomías que no ha impuesto un cierre perimetral.

La situación está provocando un debate sobre por qué una región con tal densidad y movimiento poblacional ha conseguido, en teoría, doblegar una curva que no para de crecer o no se contiene tanto en zonas con mayores restricciones. Ante ello, el viceconsejero madrileño de Salud Pública, Antonio Zapatero, ha atribuido este viernes la buena evolución a una "conjunción" de factores y a la "responsabilidad de los madrileños".

El que fuera director del hospital de Ifema ha destacado que la región empezó a tomar medidas antes que el resto, sobre todo concentradas en las áreas sanitarias con más casos. "Trabajar por zonas básicas de salud porque nos ha permitido ver la evolución casi portal por portal", ha señalado.

Los tests de antígenos

"Otro aspecto fundamental han sido los tests de antígenos", ha proseguido, recordando que se han realizado ya cerca de 700.000 pruebas rápidas, del lote de cinco millones adquirido. Por último, ha citado la colaboración de la policía municipal en las cuarentenas o la contratación de 1.600 rastreadores.

Ante ello, el lunes próximo se levantan las restricciones en 10 zonas básicas de salud, seis de ellas situadas en Madrid capital, y se mantienen en otras 22. Las limitaciones siguen acotadas, por tanto, a áreas pequeñas y mal definidas, pese a la confusión que esto genera entre los vecinos y las críticas que ha recibido por parte de los expertos, dado que apenas hay controles y las excepciones para salir y entrar son amplias. El Gobierno central, de hecho, impuso a Ayuso un estado de alarma para obligarle a cerrar Madrid capital y los municipios grandes, medida que estuvo en vigor 15 días y que no ha sido citada por Zapatero entre los motivos de la evolución.

Las dudas

Sin embargo, reconocidos epidemiólogos como Daniel López-Acuña, exdirector de crisis de la OMS, ponen en duda la premisa principal. En declaraciones a El Periódico de Catalunya, considera que la incidencia en Madrid está "infravalorada" debido, entre otros motivos, a que han dejado de hacerse pruebas a todos los contactos estrechos. "No es concebible que la curva descienda tan rápidamente porque no hay medida alguna que logre este efecto", asevera.

Por el contrario, médicos como David Andina considera que las restricciones a la movilidad y a las reuniones "han ayudado" y que el "foco mediático" se situara en Madrid "seguramente ha modificado las conductas de la gente". "Se juntan varios factores", sostiene.

A su vez, Javier Padilla, experto en gestión sanitaria, avisa de que los datos oficiales revelan que la incidencia ha bajado de forma similar en las zonas sin restricciones, por lo que no parece que el descenso esté relacionado con "la acción" de Ayuso, sino con otras "dinámicas" como una mayor retracción social y la mayor inmunidad en Madrid que en otras regiones. Y añade con humildad: "Hay cosas que no sabemos y que tendremos que seguir estudiando".

La defensa de Oriol Mitjà

A la polémica estrategia de la Comunidad de Madrid le ha salido además un firme defensor: el infectólogo Oriol Mitjà, a quien Quim Torra eligió como asesor del Govern en marzo. Mitjà ha liderado una investigación que concluye que los tests de antígenos son efectivos para detectar a las personas más contagiosas y este jueves subrayó que a él le "gustaría más trabajar en Madrid" que en Cataluña, debido a que el Govern es reacio a usar estas pruebas en los cribados masivos.

El secretario catalán de Salud Pública, Josep Maria Argimon, receló ese mismo día de los mencionados tests y confesó que no sabe bien qué ha funcionado en Madrid.

Las áreas 'liberadas'

Las 10 zonas sanitarias que a partir del lunes no tendrán restricciones son: Brújula y Las Fronteras, en Torrejón de Ardoz; El Espinillo, San Andrés y San Cristóbal, en Villaverde; Rafael Alberti y Peña Prieta, en Puente de Vallecas; Vinateros-Torito en Moratalaz; San Blas, en Parla, y el municipio de Guadarrama.