En medio de la crisis con Marruecos, el Rey, acompañado de la ministra de Exteriores entrega los despachos a los nuevos diplomáticos reforzando esta idea: "España es Europa, una misma realidad histórica, cultural y geográfica". Un mensaje, la de que Ceuta es una frontera europea, que ya trasladó Bruselas y que para el Gobierno ha sido clave en la reducción de la tensión, También los mensajes de firmeza. El de la ministra de Defensa que hoy afirma que España no aceptará chantajes y que se garantizará por todos los medios la innegociable integridad territorial. El Gobierno no ha considerado necesaria la mediación del rey en esta crisis pero sí pide el apoyo de la oposición, y lamenta la postura del PP. El PP ofrece su apoyo pero no para callar o aplaudir, dicen, una actuación ineficaz del Gobierno.