Hasta seis robos con violencia o en grado de tentativa, se enfrenta por el momento un gijonés nacido en 1982 que acaba de ser detenido por la Policía Nacional y al que se considera autor de estos asaltos, principalmente cometidos en edificios del barrio de El Llano, en las últimas semanas. La lista, porque las pesquisas siguen en marcha, podría ir en aumento para ampliar el historial delictivo de este individuo que en sus acciones delictivas llegó a esgrimir un arma blanca y causar lesiones en un brazo a una vecina que le sorprendió “in fraganti”. Está previsto que esta mañana pase a disposición judicial por todas sus acciones.
Uno de los primeros delitos que se le atribuyen a este gijonés ocurrió el pasado 21 de junio en un piso de la calle Fray Ceferino, en El Llano, al que accedió después de forzar la puerta de entrada de la casa, que estaba sin sus moradores en ese momento. Una vez en el interior de la vivienda se apoderó de varias joyas y otros objetos de valor que luego trató de venderlas en una tienda de compraventa de oro de la ciudad. Las cámaras del sistema de vigilancia del negocio le grabaron con esas joyas, lo que resultó fundamental para los investigadores. La joyas pudieron ser recuperadas en su mayoría tras el reconocimiento de las mismas por parte de la afectada. Pero no todas.
La agenda delictiva de este hombre fue mucho más intensa el pasado 5 de julio, cuando supuestamente trató de perpetrar, al menos, tres delitos de robo con fuerza, también en un edificio de la calle Fray Ceferino y un cuarto robo en grado de tentativa en la calle Decano Prendes Pando, en la parte del barrio de Laviada. Algunos de los vecinos se percataron de sus intenciones y lograron evitarlo, pero a uno de ellos le sacó un arma blanca, según las declaraciones de los afectados, y a otra vecina le provocó daños en un brazo, por lo que se le atribuye otro delito leve de lesiones. Luego huyó del lugar con las manos vacías, pero dejando sus huellas en varias de las puertas que trató de violentar para acceder al interior de las casas.
El último hecho delictivo por el que también deberá responder este gijonés ocurrió en la calle Lastres, en el barrio de Laviada, y también en un edificio, el pasado día 6 de julio. Fue esta acción delictiva la que motivó su detención por la Policía Nacional. Este hombre, siguiendo su “modus operandi” habitual, había entrado al inmueble, y en uno de los rellanos de las escaleras se topó con una bicicleta atada a un candado. En el momento en el que trataba de forzarlo para llevarse el vehículo, fue interceptado en ese momento por la Policía Nacional. Además de ese robo, dado que trató de evitar su arresto, se le atribuye otro delito de resistencia a la autoridad.
El delincuente, con antecedentes y otros arrestos previos, fue trasladado a la comisaría de El Natahoyo a la espera de tomarle declaración por los hechos y avanzar en las diligencias correspondientes. Con su detención se han permitido esclarecer policialmente toda esa lista de robos ocurridos en El Llano y Laviada en las últimas semanas. No obstante, se sigue investigando por si finalmente se le atribuyen más delitos de robos con violencia perpetrados en la ciudad y que estén pendientes de esclarecer. Todo apunta a que este hombre pase a disposición del Juzgado de Guardia a lo largo del día de hoy.
Las claves
- Delincuente. Un gijonés nacido en 1982 con otros antecedentes. Actuó en varios edificios de los barrios de El Llano y Laviada con intención de robar en pisos tras entrar a los edificios.
- Robos. Uno de ellos consumado, en el que se apoderó de varias joyas, y otros cinco en grado de tentativa. Fue interceptado cuando trataba de forzar un candado para llevarse una bicicleta de un edificio de la calle Lastres.
- Delitos. A los robos con violencia o en grado de tentativa se suman las amenazas con arma blanca que esgrimió a un vecino que le sorprendió y por lesionar a otra vecina.
