El atasco en el área municipal de licencias, con esperas que pueden superar el año para la concesión de permisos de obra sin mayor complicación aparente, no remite y está ralentizando el proceso de recuperación de la construcción en Gijón, donde hay numerosos proyectos residenciales en marcha. Esta es la denuncia que realizan arquitectos consultados por este diario, que urgen al Ayuntamiento a poner en marcha una reorganización del servicio para que gane en agilidad. “Esto no es cuestión de meter más gente, sino de organizarse mejor y de que no se pierda tanto tiempo al pasar los expedientes de un departamento a otro”, subraya un profesional, que también se queja de las dificultades que hay para conocer cómo se encuentran las solicitudes de los permisos.
“Hubo un tiempo en que las licencias se otorgaban en apenas tres meses, pero los plazos se han ido alargando y ahora no es extraño que las demoras se acerquen o superen el año ”, subraya otro arquitecto, que incide en el perjuicio que esta circunstancia genera entre los profesionales de la construcción y a quienes quieren abrir un negocio. La necesidad urgente de acortar los tiempos de espera que reclaman los profesionales coincide en el tiempo con un auge del ladrillo en la ciudad, que se recupera de su última gran crisis, aunque todavía está lejos de las cifras que se manejaban antes de la recesión.
De acuerdo con los últimos datos facilitados por el Colegio de Aparejadores del Principado de Asturias, Gijón fue el municipio asturiano en el que más visados de obra nueva se firmaron durante el pasado ejercicio, con un total de 637, frente a los 523 de Oviedo. Sin embargo, el nivel de crecimiento en Gijón respecto al ejercicio de 2019 fue la mitad que el registrado en la segunda ciudad más poblada del Principado. Los expertos consideran que Oviedo, donde se ha puesto en marcha un plan de choque para facilitar la concesión de licencias, y también Siero crecen más rápido en número de visados por la agilidad que dan a los permisos. Se da la circunstancia que, según un estudio llevado a cabo por el Colegio de Arquitectos en 2018, Oviedo era entonces el ayuntamiento de Asturias que acumulaba un mayor atasco en sus licencias.
Los Caleros
Pese a este problema con las licencias, el sector de la construcción en Gijón atraviesa un periodo que se podría calificar como de auge, con numerosas promociones en marcha y varias de carácter exclusivo en primera línea de playa o muy cercanas a los arenales. A los proyectos activos en la ciudad se les unirá en breve el de los Caleros, cuyo plan especial acaba de ser aprobado por el Pleno. Se trata de una importante iniciativa que prevé la construcción de más de 200 viviendas, entre unifamiliares y bloques, en Contrueces. Los edificios de varias alturas van el camino de Caleros, en el nuevo vial de conexión y en el camín del Llagar. Las casas unifamiliares se ubicarán en el entorno de los llagares Pepe Roces y Contrueces. Además, aunque en una fase de desarrollo menos avanzada, los servicios de Urbanismo del Ayuntamiento también están analizando un plan especial para una zona residencial dotada con 70 viviendas entre la avenida de la Argentina y la calle Agustín Argüelles, en el Cerillero.
Junto a las obras de nueva construcción, la ciudad ha asistido durante los últimos años a una notable actividad en cuanto a rehabilitación de edificios de valor arquitectónico que estaban en una situación de ruina. Los últimos proyectos en este ámbito, tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, se ubican en las calles Cabrales y Marqués de San Esteban.
Los arquitectos consultados estiman que agilizar la concesión de las licencias de obras sería muy relevante para consolidar e, incluso, dar un mayor vuelo a este buen momento que atraviesa la construcción en Gijón.
