El Día Mundial del Sueño, celebrado ayer, puso de manifiesto que la mayoría de la gente sabe que la falta de sueño puede causar mal humor, hacer que la piel envejezca más rápidamente y afectar a la capacidad de concentración, pero la privación de sueño también puede afectar seriamente a la capacidad de conducir de manera segura, un factor importante en hasta 1 de cada 5 accidentes de tráfico.

Según los expertos, permanecer despierto por períodos superiores a 18 horas puede llegar a perjudicar la capacidad para conducir hasta un grado comparable al de superar el límite de consumo de alcohol en muchos países.

Un "traje de sueño" preparado por Ford permite a los usuarios experimentar en un ambiente seguro los efectos debilitantes que el cansancio puede tener. Las gafas del "traje de sueño" simulan los microsueños, que pueden hacer que la gente conduzca a ciegas. Conectadas a una aplicación para teléfonos inteligentes, las gafas pueden ajustarse para simular el "apagado" del cerebro y que el conductor no vea nada por delante durante medio segundo, efecto que se va ampliando a períodos cada vez más largos, de hasta 10 segundos. No beber es el único antídoto para no superar el límite legal de alcohol al volante y dormir es la única cura para el cansancio. Hacer paradas para descansar cuando sea seguro hacerlo, tomar bebidas con cafeína y echar una siesta durante 20 minutos pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte.