Langreo, L. M. D.
Alas Aluminium tiene los días contados. Así lo indica el desarrollo del concurso de acreedores de la compañía, ya que, como apuntaron los administradores concursales de la empresa a los trabajadores, a día de hoy no hay ninguna compañía interesada en hacerse con la aluminera de Ciaño. En los meses transcurridos desde el cierre de la empresa, que se produjo en septiembre, ninguna compañía ha contactado con los administradores para comprar la planta. Por el momento tampoco hay una propuesta de acuerdo con los acreedores, si bien el plazo para que se presente aún está vigente, ya que la fase del concurso abierta para negociar con ellos comenzó el 31 de enero.
Si las esperanzas de encontrar un inversor que pudiese al menos comprar la factoría de Alas Aluminium y recolocar a parte de la plantilla eran remotas, «las posibilidades son cada vez menos», tal y como expuso el portavoz del comité de empresa, José López. Hace unos días el comité mantuvo contactos con los administradores, que volvieron a reafirmar que dar continuidad a la actividad en la factoría es poco menos que una utopía. López expuso que «no hay ni interesados ni una propuesta de convenio con los acreedores». Si la situación sigue del mismo modo, sin que se produzca ningún tipo de avance, la liquidación definitiva de Alas Aluminium, la mayor empresa creada en el valle del Nalón gracias a las ayudas de la reactivación minera, se producirá a lo largo del mes de mayo. Los ya ex trabajadores -en realidad la firma cuenta sólo con tres, que se encargan del proceso de desmantelamiento de la firma- tampoco han tenido en los últimos meses noticias del Gobierno del Principado de Asturias, que lidera Francisco Álvarez-Cascos. En su día el comité solicitó un nuevo encuentro con el consejero de Economía y Empleo, José Manuel Rivero, pero no hubo respuesta. Ahora ya, ante la convocatoria de nuevas elecciones «no hemos vuelto a insistir».
Antes del verano de 2011, Alas Aluminium contaba con una plantilla compuesta por 258 trabajadores. En junio se rescindieron los contratos de 174 personas, a las que se añadieron 56 más en septiembre y 25 en noviembre. Los administradores concursales habían puesto como fecha límite para hallar un inversor para dar continuidad a la actividad de la compañía el día 6 de diciembre. Al no llegar propuesta alguna, se inició el proceso de liquidación, que sigue en marcha y que culminará, previsiblemente, en el mes de mayo.
La planta de Ciaño inició su actividad en el año 2005, y en los momentos de mayor actividad llegó a rondar los 400 empleados, de los cuales cerca de 300 eran fijos y un centenar, eventuales. Alas Aluminium acumuló entre 2005 y 2010 unas deudas que alcanzaron los 58,5 millones de euros. Cuando se puso en marcha el proyecto sus promotores -un conglomerado de empresas del metal asturianas- recibieron 16 millones de euros en ayudas públicas para levantar y desarrollar la factoría, que se instaló en la escombrera del pozo María Luisa merced al apoyo de la empresa estatal Hunosa a la iniciativa. En solo cinco años la empresa tuvo que hipotecar prácticamente todos sus activos, lo que acabó llevándola al concurso de acreedores hace un año.
