La actriz candasina Paula Echevarría no falla en su tierra cada verano y estos días disfruta con su familia del descanso, mucho más hogareño que en otras ocasiones. Con ella está su pareja, el futbolista Miguel Torres, con el que disfruta en terrazas y restaurantes por la villa candasina. La pareja cenó dos jornadas en el restaurante Llagar de Pola, ubicado a pocos metros de la vivienda de sus padres; y también se les vio tomando algo con sus familiares en la terraza de El Pirata y el restaurante La Parra. En este último, la hija de la actriz, Daniella, estuvo jugando con sus primas en los soportales del viejo Ayuntamiento de Carreño.
Echevarría no duda en compartir en sus redes sociales imágenes en su casa de Perlora, donde están pasando el mayor tiempo estos días. Y es que Candás está a tope de turistas y la presencia de la actriz y empresaria, con gran fama, podría causar algún que otro revuelo.
Miguel Torres, su pareja, está de lo más integrado en Candás. Precisamente ayer tenía previsto surcar la costa asturiana junto a su amigo Marcelino Torrontegui, con quien coincidió en el Málaga CF siendo Torres jugador y Torrontegui masajista. Sin embargo, pospusieron la cita, quizás por el mal tiempo. Torres quiere conocer algo más sobre las artes de pesca a bordo de una embarcación de recreo. El disfrute no tiene por qué ser siempre en pareja. De hecho, la actriz ya está organizando con sus amigas la tradicional cena en la que todos los veranos se reúnen en un restaurante candasín. Otros años optaron por La Parra, pero este parece que aún no está decidido.
Donde no podrá ir será a Casa Sandalio, un habitual en la agenda de Echevarría, que cerró sus puertas meses atrás. Lo que está claro es que la pareja y la hija que Paula tuvo con el cantante David Bustamante disfrutan de lo lindo de sus días de asueto en Candás.
