La confianza, la supresión de elementos de seguridad del vehículo para trabajar más rápido y la falta de formación son algunas de las principales causas de los accidentes de tractor que se registran cada año y que padecen tres de cada cien agricultores, según las estadísticas. El Franco acogió ayer el primer curso de un proyecto de seguridad en el medio rural, que busca reducir las altas tasas de siniestralidad del sector.

Un total de 13 personas asistieron al primero de los 12 cursos que se desarrollarán por toda Asturias. La segunda cita será este viernes en el polígono tinetense de La Curiscada. Esta iniciativa ha sido impulsada de manera conjunta por la Consejería de Agroganadería, la Dirección General de Tráfico, Capsa, Itvasa y el Instituto Asturiano de Riesgos Laborales. El coordinador del proyecto, Pablo Santiago, destaca la singularidad de que todas estas entidades se unan para evitar accidentes y sensibilizar a los agricultores sobre el correcto manejo diario de los vehículos agrícolas.