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"Yo me subiré a la barca en La Ribera", dice el recitador de l'Amuravela de Cudillero

Cesáreo Marqués rechaza grabar el famoso sermón a San Pedro, al que el coronavirus ha inspirado: es más largo y será "jocoso, pero no frívolo"

Cesáreo Marqués, durante el sermón de l'Amuravela, en La Ribera, el 29 de junio del año pasado. MIKI LÓPEZ

Podría ser l'Amuravela más largo de la historia. Así lo avanza Cesáreo Marqués, el compositor y recitador del famoso sermón a San Pedro que se celebrará "sí o sí" el próximo 29 de junio en el centro de Cudillero como reza la tradición y como se ha hecho desde 1569 salvo algún parón ocasional. Marqués está "sorprendido" con el texto resultante, muy extenso, "pese a que en marzo se paró el mundo".

L' Amuravela tiene tres peculiaridades. Una, cuenta a San Pedro qué pasó en el último año. Dos, se recita en pixueto. Y tres, es seguida en directo por una multitud que año tras año abarrota la plaza de la Marina o La Ribera.

"Con la pandemia, creí que me quedaría sin temas; al no haber movimiento ni encuentros señalados como la Semana Santa, cuenta Marqués.

El vecino pixueto, ya jubilado, ha dado muchas vueltas a este sermón de tiempos de coronavirus y estado de alarma. "Quiero contar qué pasó con el virus, pero no perder el tono jocoso ni resultar frívolo", indica. El recital no será en todo caso monotemático. "Para nosotros es importante la pesca, una actividad que apenas paró, y los cambios de gobierno", concreta Marqués.

En cuanto al escenario, el recitador apuesta por la céntrica plaza de La Ribera y descarta hacer una grabación para emitirla en diferido. El alcalde, Carlos Valle, prohibió la semana pasada las fiestas patronales del verano y otro tipo de encuentros de multitudes por la crisis sanitaria, si bien dijo que habría l'Amuravela. Entonces, indicó que estaban abiertas "todas las posibilidades", incluida una grabación o una retransmisión en directo, para evitar que Cudillero se quedara sin sermón.

Sin embargo, Marqués acota las opciones. "No habrá grabación, a eso me niego. No sabemos qué pasará en junio, pero si la desescalada lo permite, yo me subiré a la barca en La Ribera", dice.

Queda por saber qué pasará con al apuntador, quien normalmente se encuentra en la barca que hace de escenario, muy cerca de Cesáreo Marqués, para dar paso a unos versos que el protagonista recita sin apoyo de papel. "Para este asunto tenemos tecnología; no nos preocupa, ya que no es la primera vez que usamos auriculares", indica Marqués.

El sermón será el único acto del programa festivo de San Pedro y San Pablo. Como es una tradición "del pueblo, nadie manda sobre él y creemos que debe celebrarse aunque sea con la gente en las ventanas", dice Cesáreo Marqués. También habrá misa según los nuevos aforos para cumplir la distancia física entre personas y, en su caso, procesión.

En la comisión de fiestas, apoyan esta propuesta. El presidente de la nueva directiva, David Pola Pedregal, entiende que no se puede cumplir con todo lo programado pese a la "ilusión y esfuerzo" que han puesto en un renovado calendario de actividades que, finalmente, no podrá materializarse. "Sin duda, al salud es lo primero y, al margen de lo que se pueda hacer en las fases, sería una gran irresponsabilidad celebrar cinco días de fiestas y tener un brote en Cudillero, donde el virus está controlado", destaca Pola.

La comisión de fiestas trabaja ahora en una programación especial para el Día de Asturias, el 8 de septiembre. "El fin es ayudar a los comercios y la hostelería", subraya el presidente de la comisión de fiestas.

El Ayuntamiento, por su parte, ha colgado un bando para prohibir todas las fiestas patronales en el concejo. Esta bando tiene el apoyo de la federación que agrupa a las comisiones de festejos de los pueblos. Su portavoz, Jaime López, destaca que de esta forma "se cumplió con el requerimiento que hicimos para evitar problemas". Con la prohibición expresa municipal se podrán cancelar actuaciones que, por imperativo de una administración pública, no podrán celebrarse. "Esto permite a las comisiones tener un respaldo legal para cancelar un precontrato sin contratiempos económicos, ya que para cuando los pueblos celebren sus fiestas, no tendremos el amparo del estado de alarma", añade López.

El Ayuntamiento de Cudillero se reserva el derecho a hacer cambios y permitir fiestas y encuentros en caso de que la evolución de la pandemia lo permita.

En todo caso, Cudillero es el primer concejo del occidente asturiano que ha hecho oficial y expresa la prohibición. En otros municipios de la comarca están pendientes de las próximas directrices del gobierno central y del final de la desescalada para tomar una decisión oficial.

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