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La Guardia Civil desmantela una plantación de marihuana en una vivienda de Tebongo (Cangas)

La operación sorprende a los vecinos de la zona, que desconocían que la casa estuviera alquilada y no habían apreciado movimiento en el lugar en los últimos tiempos

La casa en la que actuó la Guardia Civil el martes en Tebongo. | D. Á.

El pueblo de Tebongo, en Cangas del Narcea, vivió el martes una intervención policial de película. En una casa al pie del corredor del Narcea, la carretera AS-15, la Guardia Civil desmanteló una plantación de marihuana. La operación se desarrolló durante toda la mañana de esa jornada.

A los vecinos de este tranquilo pueblo cangués, así como a las empresas que trabajan en el polígono industrial muy próximo a la vivienda en cuestión, les sorprendió el movimiento que de repente esa mañana se podía ver en una casa, en la que desde hacía años no se apreciaba que hubiese actividad. Todo el que pasaba por la carretera que lleva a Cangas del Narcea podía ver como al patio delantero de la parcela, siempre vacío, llegaban coches y furgones de los agentes. La GuardiaCivil no aportó ayer dato alguno sobre la operaciónen Tebongo. Fuentes de la Benemérita explicaron que se trata de una investigación que aún está abierta y en curso. Otras fuentes consultadas apuntaron que la operación pudo haberse saldado con dos detenidos.

Tras la actuación policial, la casa ha quedado precintada. Ayer, el portón de entrada a la finca se podía ver cubierto con la cinta de la Guardia Civil.

Ninguna sospecha

En la localidad canguesa, personas que viven y trabajan cerca de la casa aseguraron que se desconocía que estuviera habitada, ya que desde hacía años no se habían percatado de ningún movimiento en ella. Así que mucho menos podían sospechar que dentro se pudiera estar cultivando marihuana. Apuntaban además que los dueños de la vivienda, que es de grandes dimensiones, no residían en ella sino que la solían tener arrendada.

De hecho, los propietarios del inmueble viven fuera del concejo de Cangas del Narcea. Ayer LA NUEVA ESPAÑA se puso en contacto con ellos, aunque declinaron realizar comentario alguno al respecto.

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