Síguenos en redes sociales:

Pablo JuncedaDirector general del Sabadell Herrero

"Gallegos y asturianos comparten el ser muy ahorradores y magníficos pagadores; los índices de morosidad en el Noroeste son bajos en comparación con otros territorios"

"El Occidente es un valor seguro y haríamos bien potenciando la actividad y el turismo de calidad, de naturaleza y cultura, que huye de las masificaciones"

"Gallegos y asturianos comparten el ser muy ahorradores y magníficos pagadores; los índices de morosidad en el Noroeste son bajos en comparación con otros territorios"T. Cascudo

El bancario Pablo Junceda no entiende un verano sin pisar la comarca occidental. Comenzó de niño a veranear en Navia con sus padres y, desde hace una década, el director general del Sabadell Herrero tiene fijado su refugio estival en el pueblo coañés de Ortiguera, donde disfruta de unas espectaculares vistas al Cantábrico. Desde Coaña atiende a LA NUEVA ESPAÑA para disertar sobre el futuro de Asturias, la mejora de las comunicaciones y la situación económica actual.

-Los mercados y la economía no descansan, ¿lo logra un directivo de la banca?

-Si decides quedarte en Asturias trabajando aquí, que es la decisión que yo tomé, porque creo que esto es un paraíso, ya asumes que vas a tener muchos compromisos y asuntos vinculados al trabajo. Con lo cual, yo lo que hago es no cambiar los biorritmos, sigo madrugando y a las seis y media o siete de la mañana ya estoy regando las hortensias, que además este año, o las riegas, o mueren. Leo la prensa, trabajo un poco y luego, toca familia, navegar, que me encanta, y leer. Menos una semana que estoy en Salas, con mi familia política, el resto del verano estoy aquí. Me siento muy de aquí, tengo mis raíces, mis amigos, a mis hermanos, a mi madre…

-O sea que no llega a desconectar al cien por cien…

-Quedándote en Asturias es muy difícil, porque el banco además está muy activo durante todo el verano con la Feria de Muestras, tenemos patrocinios que hay que atender y, aunque tengo un equipo fenomenal, pues muchas veces hay cosas que me toca hacer y las hago con gusto.

-¿Cómo ve el Occidente?

-Los concejos tractores de la región, me refiero a Oviedo, Gijón, Avilés, Llanera y Siero, ya tienen de todo y buenas comunicaciones. Está muy bien reforzar o impulsar las áreas metropolitanas, pero tiene que ir unido necesariamente al diseño de unos planes específicos para las alas de Asturias. Y en las alas diferencio lo que es la costa, del interior. La zona interior de las alas necesita que se la apoye con planes específicos porque además es un territorio que está muy por descubrir en el plano turístico, pero sobre todo, es la despensa de Asturias.

-¿Se llega tarde?

-Hasta ahora hemos pedido que se finalizasen las infraestructuras que acercan Asturias al resto de España y a Europa. En diciembre, según nos dicen, esas infraestructuras estarán muy completadas con la llegada del AVE, por lo que creo que es el momento de hacer dos cosas: empezar a preocuparse por el futuro que le queremos dar a las alas y finalizar la otra gran infraestructura, más de carácter industrial o empresarial, que es el eje Noroeste. Quizás la ciudadanía no la ve con la prioridad que vemos el AVE o veíamos la Autovía del Cantábrico, pero el eje Noroeste es vital para el mundo empresarial. Debería unir Portugal y la Cornisa Cantábrica y tiene un objetivo muy claro, que es que todas las capacidades industriales o de otro tipo de Asturias se pongan en valor. El mundo a nivel empresarial e industrial se mueve a través del ferrocarril y, desde luego, una vez que ya tenemos el AVE, deberíamos estar muy unidos para lograr el eje Noroeste, que creo que va a ser muy importante para las alas de la región.

Pablo Junceda en Ortiguera.

-De momento, lleva la delantera el eje del Mediterráneo…

-Los empresarios del eje Mediterráneo lo vieron clarísimo y de ahí el impulso que le están dando. Los del eje Noroeste creo que también lo tenemos claro. Se consiguieron avances cuando el mundo institucional lo reivindicó junto a los empresarios. Estoy tranquilo porque sé que los gobiernos de Asturias, Galicia y Castilla y León, y ahora además los de Cantabria y País Vasco, tienen clara la idea, ahora hay que impulsarla unidos. A nivel empresarial deberíamos hacer un ejercicio de explicar con detalle a la ciudadanía porque este eje, que es puramente industrial de mercancías, pero que también puede ser de personas, es tan vital.

-Exconsejeros como Jesús Arango reclaman planes comarcales que revitalicen las zonas rurales de Asturias. ¿Coincide?

-En el mundo de la empresa solemos funcionar por planes de actuación. Evidentemente los tenemos a corto plazo, pero los que verdaderamente transforman las cosas son los planes de actuación en el largo plazo. En esto hay que ponerse manos a la obra cuanto antes. Siempre digo que en Asturias tenemos la suerte de tener estabilidad institucional, que no debe servir para aislarte solo con tus ideas, sino que es algo que te da tranquilidad para escuchar. Si queremos transformar Asturias y si queremos transformar las alas de Asturias el secreto es muy sencillo: hay que escuchar mucho para hacer y hacer mucho después de escuchar. Es el momento de escuchar, hablar con los concejos y los empresarios y directivos que conocen bien las alas y después hay que hacer. Hay un asunto que creo yo que un presidente de una autonomía debe de tener permanentemente en la cabeza.

-¿Cuál es?

-Es ejecutar el presupuesto. De poco nos sirven unas consejerías idóneas si luego resulta que, cuando acaba el año, no se ha ejecutado el presupuesto y se ha invertido el treinta o el cuarenta por ciento, por eso digo que hay que escuchar y luego hacer.

-Pero ahí juega un papel clave la lentitud de la burocracia ¿no?

-La estabilidad institucional y parlamentaria permite hacer las transformaciones normativas que impulsen al funcionariado a sentir que la ejecución presupuestaria, esto de ser ágiles dentro de la ley, es clave para Asturias. Siempre digo que la clase funcionarial en nuestro país y, por supuesto, en Asturias es muy comprometida. Es clave que vayamos todos de la mano en el ejercicio de la ejecución presupuestaria. En cosas que son necesarias no podemos tardar y eternizarnos permanentemente.

-¿Cuánto lastra la burocracia al desarrollo económico?

-Está lastrando bastante y, por eso, las cosas que haya que cambiar hay que cambiarlas. Me fío más de las acciones que en los pensamientos, porque ideas maravillosas que no se llevan a cabo ¿para qué sirven? La velocidad a la que va la competencia en otros territorios es tal que o nos ponemos a la altura o nos quedamos atrás.

-En marzo, en una intervención en el Círculo de Empresarios de Galicia, defendió que España no tendría una recesión profunda o prolongada ¿lo mantiene?

-El año pasado por el verano todos pensábamos que iba a ser un verano de “restayo”, pero luego se decía que la que iba a venir en septiembre o octubre iba a ser tremenda. Fue un verano de “restayo” y en septiembre no vino nada. La economía sigue yendo bien. Este año vuelve otra vez la serpiente de verano de que va a ser un verano estupendo, pero ¡ay! lo que va a venir en septiembre. Yo creo que la fortaleza del empresariado en Asturias y en España es muy sólida y la economía española comparativamente con otras economías europeas continúa a buen ritmo.

-¿Hay algo que le preocupe?

-Durante estos años vivimos una situación que no se había producido en la historia, que es un mundo de tipos de interés cero. La subida de tipos de interés ha llegado para quedarse porque es una situación de tipos de interés normales. Tenerlos al 4 o al 4,5 es algo normal, lo que no era normal era tenerlos a tipo cero o negativo. Como han sido unos cuantos años con esta anormalidad de tipos, me preocupa que, a nivel familiar y a nivel empresarial, no se tenga en cuenta, ya sea para poner en marcha una nueva línea de negocio como para comprar tu casa, que hay que contar con esta variable. Esta situación ha llegado para quedarse. Hay una peña al oeste del cabo San Agustín que se llama Las Llamosas y ahí se quedaron muchos barcos porque en marea alta apenas la ves. Haciendo un símil con la navegación, teníamos la opción de pasar esa peña por el lado de la inflación o pasarla arriesgándose a un poco de recesión. Es decir, la subida de tipos puede provocar una leve recesión, pero es mejor esto que no caer en una inflación porque la inflación es un enemigo silencioso y terrible. Si no se controla, nos empobrece a todos. La solución idónea es subir tipos y arriesgándote a que, quizás, pueda haber una cierta recesión. Esta variable de tipos de interés ha venido para quedarse porque es lo normal.

-En la práctica, ¿es buen momento para comprar una vivienda o animarse a montar un negocio?

-Decía mi suegro Pepe Cosmen, que fue un gran empresario, que "para comerciante Dios, que sabe lo que va a pasar". Esta es una de las enseñanzas más bonitas que me quedó. Para lanzar un proyecto, tienes que contar con una magnitud que es el coste de la financiación. Mis padres sacaron adelante los proyectos empresariales y familiares con tipos de interés de hasta el 14% y, dicen los empresarios de más edad, que hasta del 24%, y salían adelante. Si el proyecto con números tiene sentido, no hay por qué esperar a que venga septiembre, ni diciembre, yo animo a lanzarse.

-¿Hasta qué punto falta más formación en finanzas personales?

-Nosotros vamos a lanzar con Valnalón, que es un centro de emprendimiento muy potente, un programa de finanzas en la escuela. Hay muchos países que económicamente están más avanzados y que esto lo tienen muy desarrollado. Esto tiene que ir unido a algo importante y es que todos tengamos claro que la riqueza y los puestos de trabajo no los genera la administración, sino la empresa y la iniciativa privada. Por tanto, en la escuela hay que explicar y animar a los chavales para que sepan que una de las opciones más bonitas de desarrollo profesional que hay en esta vida es el mundo de la empresa. Hay que enseñarles también que, en ese mundo, cuando las cosas van mal, uno se puede volver a levantar. En Estados Unidos dicen que alguien es un buen empresario cuando se ha arruinado un par de veces. También hay que decir que una buena economía es la que tiene buenos bancos y los bancos tenemos que empezar a verlos como aliados.  En este país y en Asturias hay buenos bancos. El acercamiento al mundo de la empresa y de la banca tiene que estar basado en la confianza.

-Hablaba antes de la inflación ¿Cuándo tocará techo?

-La subida de tipos tiene como objetivo atajar la inflación y, en la medida en que estas subidas se vayan ralentizando, tendremos la clave de que la inflación se empieza a controlar. No será cosa de meses, pero ya los índices de inflación los iremos viendo reducidos poco a poco. 

-El quince por ciento de los españoles pide un crédito para irse de vacaciones ¿Qué le parece?

-Esto demuestra que la confianza en España se mantiene. Si no tuviesen claro que pueden irse de vacaciones, no creo que sean insensatos y se vayan. Vivimos en un país con fortaleza y bienvenido sea que la gente pida financiación para irse de vacaciones porque así se llenan los bares, los restaurantes, los hoteles, los campings… Creo que es un reflejo de que hay confianza y tranquilidad.

-Lleva años como responsable de la zona Noroeste en el Sabadell ¿Nota diferencias en la gestión del dinero entre asturianos y gallegos?

-Pues es bastante parecido. Los gallegos y los asturianos, y lo mismo los de Castilla y León, son muy ahorradores y magníficos pagadores. Comparativamente con otros territorios, los índices de morosidad en el Noroeste son claramente más bajos. Incluso hay veces que hay que animarles porque son más prudentes a la hora de lanzarse a un proyecto. Quizás hay una base más emprendedora al sur de Galicia, en la zona de Vigo, pero si comparas las oficinas de Ribadeo y Foz, en la mariña lucense, con las de Navia o Luarca, en el Occidente, tienen parámetros muy similares de funcionamiento.

-¿Su plan perfecto en el Occidente?

-Levantarme temprano, trabajar un poquitín, leer y navegar. Nos gusta muchísimo fondear en Porcía (entre El Franco y Tapia). Si te levantas desde el mar puedes pensar perfectamente que estás en una cala de Mallorca. Me encanta también Santa Gadea (en Tapia), que es una auténtica maravilla, y últimamente estamos descubriendo una cala que hay en la playa de Otur (Valdés). Son sitios absolutamente maravillosos y nada masificados. El otro diamante para navegar es la ría de Navia, que es un espectáculo.

-¿Qué recomendaría a alguien que va a visitar por primera vez el territorio occidental?

-Hay que ir a Puerto de Vega (Navia) y hay que conocer el interior: Villayón, Boal, los Oscos, Ibias… La recomendación es que pare en cualquier sitio para que le den de comer porque va a acertar seguro. El otro día venía de Salas con mi mujer y paramos en el Valle de Paredes, que es otra maravilla, y encontramos un chigre abierto que nos puso un poco de chorizo y chosco y fue una cosa absolutamente espectacular. El Occidente es un valor seguro y haríamos bien potenciando la actividad y el turismo de calidad, de naturaleza y cultura, que huye de las masificaciones. Es un sitio absolutamente privilegiado.

Pulsa para ver más contenido para ti