Los 45 diputados de la Junta General del Principado votaron ayer de manera unánime una moción referida al Hospital Comarcal del Oriente de Asturias Francisco Grande Covián. La iniciativa partió del PP, que presentó un texto muy general, en el que se demanda al Gobierno del Principado la corrección de las "deficiencias estructurales detectadas" en el centro hospitalario, la "adecuación de la plantilla" las necesidades propias de un hospital comarcal y un "proyecto de futuro, claro y que garantice" la continuidad del edificio y sus prestaciones. Carlos Jesús Suárez, del PP, detalló las deficiencias "históricas" del Grande Covián, como un pediatra en Llanes, ambulancias, insuficiencias en la plantilla de Enfermería, Urgencias, Pediatría, Oftalmología, Radiología, Salud Mental o Urología.

Suárez denunció la ausencia de refuerzos en épocas vacacionales, cuando la población de la comarca se triplica, y aseguró que el hospital está en "franca desigualdad", al sufrir "disminuciones en la cartera de servicios" y una "fusión encubierta" con el de Cabueñes. Según Suárez, el Gobierno socialista persigue que el Grande Covián sea "un policlínico con Urgencias". Además, criticó la discriminación que a su juicio sufre la plantilla.

Carmen Eva Pérez, del PSOE, se defendió de las críticas de la oposición, aseguró que el PSOE sí ve futuro para el Grande Covián y negó la mayoría de las deficiencias apuntadas. Dijo que en los últimos meses las compras y las obras en el hospital han sumado casi un millón de euros y que las derivaciones a Cabueñes persiguen, como en otros centros,"optimizar el uso de los equipos de tecnologías avanzadas". Retó el PP a que demuestra que ha habido recortes en la cartera de servicios y subrayó que los trabajadores del Grande Covián tienen estatus diferenciados a otros hospitales "por decisión de un tribunal", pero las demás condiciones laborales son "idénticas" a las del resto de los empleados del Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa).

Pese a las claras discrepancias en torno al hospital con el resto de los grupos, el Grupo Socialista votó también a favor de la moción de los conservadores.

Andrés Fernández, de Podemos, calificó al hospital de "campo minado", criticó la discriminación a su juicioque padece la plantilla y calificó de "torpe" la gestión de personal. "Los hospitales comarcales deben estar sanos para mantener al mundo rural vivo", añadió.

Marta Pulgar, de IU, calificó de "imprescindible" potenciar la calidad asistencial en las alas y exigió "cambios organizativos" para mejorar la atención sanitaria.

Pedro Leal, de Foro, se sumó a las críticas por las deficiencias del hospital, tanto en cuestiones materiales como de personal y criticó que los profesionales de Arriondas se vean "injustamente discriminados" y que la dotación presupuestaria siga "a la baja".

Luis Armando Fernández, de Ciudadanos, reclamó que todos los asturianos puedan acceder a una "sanidad de calidad" y a una igual "cartera de servicios". A la vista de la dispersión y el elevado envejecimiento, demandó al Principado "esfuerzos especiales" para que los vecinos de la comarca oriental no se vean desfavorecidos en materia sanitaria.