David ORIHUELA

El intenso y polémico debate de las últimas semanas no se reflejó ayer en la votación del Consejo de Gobierno de la Universidad de Oviedo, que por una amplísima mayoría superior al 80 por ciento aprobó las tres primeras fusiones en el seno de la institución académica, en los campus del Cristo, Llamaquique y Gijón. En el primer caso, las escuelas universitarias de Empresariales y Relaciones Laborales se integran en la nueva Facultad de Economía y Empresa. La Escuela de Magisterio, en Llamaquique, se suma a la Facultad de Ciencias de la Educación para conformar la nueva Facultad de Formación del Profesorado y Educación. Y en Gijón son otros tres los centros que se fusionan, la Escuela Superior de Ingeniería Industrial, la Escuela Técnica de Ingeniería Industrial y la Escuela de Informática. El centro del campus de gijonés pasará a llamarse Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón.

El rector, Vicente Gotor, se mostró satisfecho y en su comparecencia posterior al Consejo, que se celebró en un clima «muy correcto», subrayó que las fusiones habían sido aprobadas por la inmensa mayoría de los miembros del órgano de gobierno, aunque reconoció que se habían escuchado opiniones contrarias al proceso, tanto por la fusión misma como por los tiempos en los que se ha desarrollado. El rector aceptó la propuesta de los responsables de los centros educativos gijoneses para incluir en la denominación la palabra «ingeniería», algo que no estaba previsto en un principio. También hubo debate sobre la Facultad de Educación, y antes de aprobar la fusión se votó el nuevo nombre.

La creación de la Facultad de Economía y Empresa y de la Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón se aprobaron por 36 votos a favor, 5 en contra y 2 abstenciones. La creación de la Facultad de Formación de Profesorado y Educación obtuvo un resultado de 35 votos a favor, 4 en contra y 3 abstenciones.

Las fusiones afectan a un total de 11.144 alumnos: 3.841 en la Facultad de Economía y Empresa; 5.095 en la Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón, y 2.208 en la Facultad de Formación del Profesorado y Educación.

El proceso para poner en marcha la cuarta fusión en el seno de la Universidad de Oviedo, la de las facultades del campus de Humanidades, en el Milán, se iniciará el próximo mes de enero «por acuerdo con los decanos», según Gotor.

Las tres fusiones se debatieron la pasada semana en el Claustro de la Universidad, ayer fueron aprobadas por el Consejo de Gobierno de la institución y ahora serán remitidas al Consejo Social de la Universidad. El plácet final lo habrá de dar el Gobierno del Principado.

Las fusiones de centros que ayer aprobó el Consejo de Gobierno de la Universidad no supondrán un ahorro demasiado importante en las arcas de la institución. «La Universidad necesita mucho más dinero del que se puede ahorrar con esto», dijo el rector, Vicente Gotor.

En su empeño de conseguir más fondos confía Gotor en que el sello de Campus de Excelencia regional que le ha sido concedido a la Universidad genere sinergias y que algunas entidades privadas y públicas aporten dinero y subvenciones dirigidas a tres ámbitos concretos: docencia, investigación e internacionalización.

Vicente Gotor puso como ejemplo la colaboración con el Banco de Santander, que ayer se constató también en el Consejo de Gobierno con la aprobación de la convocatoria de Programas de Investigación 2010. El Santander aporta 300.000 euros a esta línea de ayudas, «y si otras empresas nos dan otro tanto estaríamos encantados», remató Gotor.

El rector reconoció que «se están buscando» acuerdos con entidades privadas, pero quiso dejar claro que de conseguirse, esos fondos irían siempre destinados a docencia, investigación e internacionalización: serían acuerdos «para fines determinados». Medio en broma, medio en serio, Vicente Gotor afirmó que «es imposible» buscar acuerdos con empresas privadas para pagar las nóminas de la Universidad, «y no voy a decir otra vez quién tiene que aportar ese dinero», subrayó.