Á. F.
El catedrático emérito de la Universidad de Oviedo, José Antonio Martínez-Álvarez, fue recompensado con la Cruz de Alfonso X el Sabio, que ha decidido otorgarle el Rey, Juan Carlos I, a propuesta del ministro de Educación.
Esta distinción se le concede «en consideración a los méritos» que ha acumulado en sus más de cincuenta años dedicados a la docencia. Martínez-Álvarez es miembro fundador del Patronato de la Fundación Príncipe de Asturias, y con esta condecoración se convierte en uno de los pocos docentes españoles en recibir este importante reconocimiento.
José Antonio Martínez-Álvarez nació en Oviedo hace 78 años, es doctor en Ciencias por la Universidad de Barcelona y catedrático de Geología Aplicada, del Subsuelo e Ingeniería Geológico-ambiental, y también de Mineralogía y Petrografía de la Universidad de Oviedo.
Su prestigio le llevó a participar en los proyectos de infraestructuras más importantes del Principado, como la autopista del Huerna -fue el primero en aconsejarla-, la «Y», la variante ferroviaria de Pajares o el puente de los Santos, entre otras.
