El servicio municipal de Parques y Jardines, la Policía Local y los Bomberos de Oviedo le siguen la pista a un pavo real. Desde hace tres días reciben una veintena de llamadas diarias de ovetenses que han visto a un ave del Campo San Francisco aquí o allá. Lo cierto es que el animal se subió el martes a una de las estructuras metálicas de ADIF que sirve de entrada a la estación de tren de la Losa, estuvo el miércoles más de ocho horas en el alféizar de un primer piso de la Argañosa y paseó a sus anchas por Comandante Vallespín, para cambiar ayer de ruta. Según los agentes y varios testimonios ciudadanos, el pavo real fue visto en Silla del Rey, la avenida de Colón, Valentín Masip y la séptima planta de un bloque de viviendas de León y Escosura.
"En cuanto lo intentan coger, salta, toma impulso y se va volando". Así justifican los trabajadores de Parques y Jardines el hecho de que el pavo haya sido bautizado con el sobrenombre de funambulista.
El método de captura de este tipo de ave, que puede llegar a volar a treinta metros de altura, no tiene nada de especial. Ni redes, ni silbatos, ni jaulas. Los encargados de cogerle deben hacerlo a mano. Sin más. Y si el ave se deja. Que no es el caso. "Como mucho se le puede acorralar entre varios si está en el suelo, pero parece que a éste le gusta mirarnos desde las alturas", dicen fuentes de la Policía Local.
Los pavos reales no siempre despiertan ternura o hilaridad fuera del su hábitat ovetense, el Campo San Francisco. Hace varios meses, uno de los trece ejemplares de la ciudad se dedicó a despertar a los clientes del hotel de la Reconquista hacia las seis de la mañana. "Hasta que no lo cogimos no paró y recibimos bastantes quejas", explican los empleados de Parques y Jardines, que estudian la posibilidad de instalar a estos animales en un recinto cerrado dentro del Campo.
En realidad, Oviedo es una de las pocas ciudades del mundo en las que los pavos reales no están en cautividad. "Es una tradición a la que los ciudadanos están acostumbrados, y no sabemos la reacción popular que desencadenaría construir una valla a su alrededor", dicen los jardineros. Sigue la búsqueda.
