Después de doce años de tiras y aflojas judiciales, el patio del colegio de La Ería se libra de la sospecha de ruidoso. El Tribunal Supremo ha fallado contra el recurso desde una comunidad de vecinos que reclamaba el cierre inmediato de la instalación. Aducían que los alumnos del colegio producían durante sus actividades en patio ruidos insoportables y que su uso era abusivo.