M. L. SERRANO
El área de Memoria Histórica amenaza con causar nuevos desencuentros en el gobierno tripartito. La competencia está sin asignar y tiene dos pretendientes. Uno formal, Somos, que ya la ha pedido a través de su peso pesado, Ana Taboada, que la quiere para su concejalía de Información y Participación Ciudadana. Sin embargo, Izquierda Unida (IU) avisa de que no renunciará a ella y que no está dispuesta a permitir "otro decretazo". Desde la coalición se exige una negociación para llegar a acuerdos que resulten satisfactorios para los socios de gobierno. "Bajo ningún concepto vamos a renunciar a las competencias de Memoria Histórica. Espero que las mismas no se designen por la fórmula del decretazo", manifestó ayer Alejandro Suárez, coordinador en Oviedo de IU.
El asunto se habló ayer al final de la Junta de Gobierno, celebrada por la mañana en el Ayuntamiento. No estaba en el orden del día, pero lo llevó la coalición, alertada por las intenciones de Somos de hacerse con la citada competencia. Al estar el Alcalde de vacaciones, la Junta la presidió Ana Rivas (PSOE), que aseguró que el asunto se tratará en próximas reuniones con el fin de sentar las bases para llegar a un acuerdo.
La asignación de la Memoria Histórica es una de las decisiones que tendrá que abordar el alcalde, Wenceslao López, en las próximas semanas. Durante las negociaciones para conformar el gobierno tripartito que desalojó al PP del poder hace ya dos meses, se puso encima de la mesa en varias ocasiones y finalmente se acordó, según distintas fuentes participantes, que se negociaría más adelante, a la hora de ajustar las competencias, una vez echara andar la Corporación.
