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Un siglo de tonada en Oviedo

En la primera mitad de la pasada centuria la capital lideró con diferencia la cantera de intérpretes de canción asturiana; después de la Guerra Civil comenzó el declive

Concurso "Ciudad de Oviedo".

El pasado mes de junio se cumplió un siglo del debut en el Teatro Jovellanos de Gijón de los cantantes ovetenses Cuchichi y Botón, después de su viaje a Cuba.

Cinco años más tarde se formaría con Miranda y Claverol el famoso cuarteto "Los 4 Ases", cuatro intérpretes excepcionales de tonada ensamblados en un excelente grupo vocal. En la primera mitad del pasado siglo Oviedo lideró con diferencia la aportación de grandes intérpretes de la tonada asturiana.

Después de la guerra civil se apreció un declive de cantantes ovetenses, a pesar de coincidir con la organización de los principales certámenes de canción asturiana de la región, como los históricos del diario "Región", los de "Rumbo a la Gloria" de Radio Oviedo, los de Radiocadena en los años 8O o el actual "Ciudad de Oviedo" que ha cumplido 26 ediciones.

Del póker de figuras históricas de la canción asturiana una mayoría abrumadora son ovetenses. Entre ellos se encuentran Cuchichi (1890-1978), Miranda(1897-1975), Botón(1892-1942), Claverol (1892-1950), Quín el Pescador (1888-1952) o Fernando Cué (1912-1951). Curiosamente los apodos o seudónimos de algunos cantantes incitan a la confusión del lugar de su nacimiento. Por ejemplo "La Busdonga" nació en el barrio de La Fuente la Plata en 1896 y debe el apelativo a que su padre había sido ferroviario en el pueblo leonés de Busdongo. "Xuacu el de Sama", aunque llevó por bandera la villa langreana, había nacido en el Campón, en las proximidades de Buenavista. Finalmente otro gran cantante "El Maragatu", natural de Nubledo (Corvera) se trasladó siendo muy niño a Oviedo.

El apodo le venía según alguna versión, por coincidir su vecindad en la calle Santo Domingo con unos vecinos de Astorga. Por tanto la nómina casi absoluta de las leyendas de la canción asturiana son ovetenses.

Con el punto de inflexión en la tonada asturiana que supusieron a finales de los años 40 y principios de los 50 los concursos del diario "Región" y en menor medida "Rumbo a la Gloria" de Radio Oviedo, la cantera de cantantes ovetenses fue significativa en cantidad pero discreta en calidad. Si resulta notable la aparición de cantantes del municipio, entre ellos recordamos a Fabián García y Lolita Chico de Trubia, Eduardo Vázquez de Las Caldas, Constantino Flórez, Manuel González "Ponteo" y José Antonio Suárez "Quexanu" de San Claudio, Leónides Fernández de Olloniego y Mary Cely de Anieves. Otros cantantes que accedieron a las finales en las cinco ediciones del concurso de "Región" fueron Gabriel López, Oscar González, José Luis Pérez Miyar, José A. Viejo y Desiderio Viejo.

Pero el declive o decadencia de cantantes que empezó a percibirse a partir de los años 60 no fue exclusivo de Oviedo. Concejos como Mieres y Aller sufrieron un desplome imparable.

En el citado periodo el mayor protagonismo correspondió a la cuenca del Nalón y más concretamente a San Martín del Rey Aurelio. En los últimos años se observó una aportación elevada de intérpretes en Cangas de Narcea y la zona de Cantabria fronteriza con Asturias.

Oviedo perdió presencia en la aportación de intérpretes de canción asturiana, pero su protagonismo en el pasado siglo ha sido indiscutible como cantera de las figuras más emblemáticas y en todo tiempo como motor de su defensa y difusión a través de la organización de los mejores certámenes, cuyo ejemplo más diáfano es el actual "Concurso y Muestra de Folklore Ciudad de Oviedo" que organiza el Ayuntamiento ovetense con la colaboración de LA NUEVA ESPAÑA, en el que se integra todo el abanico de nuestras modalidades folklóricas con la tonada como principal referencia entre todas ellas.

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