La Asociación de Jefes y Mandos de la Policía Local, Ajempol, salió ayer en defensa de su presidente, el inspector José Manuel López, cesado como comisario principal en Oviedo por su condición de investigado en la "operación Enredadera" de amaños en concursos de tráfico. Ajempol no sólo sale en defensa de López sino también de la propia asociación, a la que algunas fuentes han llegado a vincular con la trama.
Los jefes de la Policía quieren dejar claro que era labor de la asociación y más del presidente, asesorar a los distintos estamentos del Principado de Asturias en materia de Seguridad, de forma que estos encuentros no sólo no eran ilegales sino que eran la labor de López como presidente de Ajempol. La asociación agradece el "ejercicio de honestidad" del Alcalde de San martín del Rey Aurelio y de su concejal de Interior, citados por este periódico, por haber aclarado que la visita a este municipio fue en calidad de presidente de Ajempol y que en ella "no se produjo ningún tipo de contacto comercial".
Ni se compra ni se vende
La asociación de Jefes de Policía detalló en su comunicado que también organizan jornadas técnico policiales en las que participan muchas personalidades de la vida pública asturiana, y que en ningún caso hay ningún interés en ningún aspecto comercial en este tipo de encuentros. "En el seno de nuestra organización", recalcan los Jefes de Policía, "no se compra o se venden productos comerciales".
Ajempol, que lamenta y rechaza cualquier trama de corrupción y niega toda relación con la "operación Enredadera", hace otro análisis de la vinculación de su asociación con estos hechos y destaca que se han convertido en un colectivo "incómodo". "Ajempol", aseguran, "ha pasado a convertirse en una asociación de referencia para los cuerpos de Policía Local del Principado de Asturias precisamente por su espíritu reivindicativo, constituyéndose con voz propia en defensor de los intereses de un colectivo que viene demandando de una atención necesaria para la mejora del servicio a los ciudadanos, y ello, entendemos, resulta incómodo a determinados sectores que no aceptan que se piense diferente".
En este sentido, aportan también otro apoyo a la situación de José Manuel López. Si el Alcalde de Oviedo, Wenceslao López, afirmó que el comisario había cesado por un cúmulo de hechos que incluían reticencias a obedecer órdenes "muy simples", Ajempol explica ahora uno de esos roces. El comisario López, y estos días se ha citado como uno de los mayores desencuentros, trató de negarse a enviar a los agentes de oviedo a la Escuela de Seguridad Pública, dependiente del Principado y establecida en La Morgal (el propio Jose Manuel López la dirigió). Según Ajempol, esta negativa inicial, que finalmente no fue tal porque los agentes fueron enviados a dicho centro, se debe al "déficit formativo" que presenta la escuela. Ajempol afirma que ellos mismos han tratado de alertar al principado de esta situación, "advirtiendo de lo precario de la situación de la Escuela, que a nuestro juicio vive sus peores momentos", cuentan en el comunicado.
Este, y no otro, cuentan, sería el motivo por el que López, afirman desde Ajempol, mostró sus reticencias a acatar la orden, que, sin embargo, acabó aceptando, "para desgracia de los agentes y a pesar de ser una decisión política", señalan las mismas fuentes.
