Los vecinos del barrio ovetense de la Argañosa alertaron de que un hombre había entrado a uno de los garajes comunitarios de la zona. Agentes de la Policía Nacional adscritos a la brigada provincial de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Asturias se personaron en el lugar y detuvieron a B. M. B., nacido en 1991 y residente en Pola de Siero, cuando salía del garaje. Los agentes vieron que un hombre salía del garaje y que al detectar la presencia policial intentaba ocultarse. Cuando lo localizaron fue identificado, y durante un cacheo superficial y una requisa del vehículo en el que se había desplazado hasta Oviedo, la Policía encontró un total de 55 llaves magnéticas y mandos de garaje, unos guantes de trabajo, otras 10 llaves de acceso a portales, un destornillador y dos trozos de alambre utilizados para forzar los vehículos.

Durante la identificación, él mismo comunicó a los agentes que su intención, una vez accedió al garaje, era la de cometer robos en el interior de los vehículos allí estacionados, si bien no había conseguido violentar ninguno de los mismos. Igualmente manifestó que las llaves que portaba procedían de anteriores robos cometidos en garajes ubicados en Gijón y Siero y que las había sustraído de los vehículos, manteniéndolas en su poder para acceder a los garajes, motivos por los que se procedió a su detención por robo con fuerza en las cosas.

El grupo de delincuencia urbana de la Brigada Provincial de Policía judicial de esta Jefatura se ha hecho cargo de la investigación, que en estos momentos se centra en determinar e identificar a los propietarios de las llaves magnéticas y mandos de garajes intervenidos, y que podría dar como resultado el esclarecimiento de numerosos robos y hurtos en el interior de vehículos, sin descartar que el detenido pudiera ser responsables de otro tipo de delitos contra el patrimonio. Por parte del grupo de delincuencia urbana se continúan las gestiones para el esclarecimiento de otros hechos delictivos en los que el detenido habría tenido participación.

La Policía Nacional destacó ayer la colaboración ciudadana, que ha evitado posibles robos en otros inmuebles. La llamada de los vecinos y la rápida actuación policial han evitado un indeterminado número de robos en el interior de vehículos en el garaje en el que se introdujo el detenido. Además, debido a la cantidad de llaves que portaba se han evitado posibles robos en otros inmuebles de la zona.

Los robos en garajes traen de cabeza a las fuerzas de seguridad en los últimos meses. El pasado mes de noviembre, vecinos de los bloques de viviendas de las calles situadas en el entorno del colegio Carmen Ruiz-Tilve de La Corredoria denunciaron estar siendo víctimas de una oleada de robos en los coches estacionados en los garajes de los edificios. La Policía Nacional vinculó esos hechos con otros ocurridos en localidades vecinas como Lugones, en Siero.