Ignacio Echeverría, asesinado en Londres el año pasado durante un atentado terrorista reivindicado por el autoproclamado Estado Islámico, aún no tiene calle en Oviedo, un año después de que el Ayuntamiento acordase por unanimidad concederle un espacio de la ciudad. "El héroe del monopatín", llamado así por enfrentarse a los radicales con su tabla de skate en un puente de la capital británica, tenía raíces asturianas, al ser hijo del ingeniero ovetense Joaquín Echeverría. Mientras el homenaje carbayón se retrasa, la reina de Inglaterra acaba de concederle a título póstumo la "Medalla de Jorge", destinada a distinguir actos de especial valentía.
Según la concejala de Gestión de Patrimonio, Cristina Pontón, Echeverría tendrá su espacio en la ciudad antes de mayo de 2019 y el único problema que dilata la inauguración es que aún no han elegido el lugar. El Gobierno local estudia poner el nombre del "héroe del monopatín" al "skatepark" del Parque de Invierno o a la zona de obstáculos y rampas para patinadores que hay en el Campo de San Francisco. Incluso puede que se decante por una tercera alternativa.
El portavoz del PP en el Ayuntamiento, Agustín Iglesias Caunedo, fue quien propuso el año pasado la concesión del nombre de Echeverría a una calle, en virtud de su coraje.
